PNV espera que Zapatero responda a "su llamada" para negociar los Presupuestos a cambio de más autogobierno

EP
Actualizado: viernes, 25 junio 2010 14:59

Recuerda que "están en juego", no sólo las cuentas, sino "la viabilidad del Gobierno" y la celebración de elecciones anticipadas

BILBAO, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, está a la espera de que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, responda a "su llamada" para negociar los Presupuestos Generales del Estado a cambio de más autogobierno, en referencia a la propuesta que esta misma semana hizo el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu. Además, recordó que "están en juego", no sólo las cuentas, sino "la viabilidad del Gobierno" y la celebración de elecciones anticipadas.

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Erkoreka manifestó que "todo el mundo sabe que lo que está en juego a partir del mes de septiembre no es tan sólo la aprobación de las cuentas públicas del Estado para el año que viene".

"Si fuera así, seguramente, nuestra conversación, nuestro diálogo, o nuestra relación con el Gobierno y con el Grupo Socialista en el Congreso, se cirscunscribiría a eso, a las partidas y a las cuentas públicas", señaló.

No obstante, recordó que "lo que está en juego es algo más relevante y cualitativamente distinto, nos estamos jugando la viabilidad misma del Gobierno de Zapatero y, por ende, de la propia legislatura".

"Nos estamos jugando, en definitiva, si se forzará o no la celebración de elecciones anticipadas, y lógicamente, el Gobierno, en este marco, ante esta expectativa, busca un marco de estabilidad y un horizonte más o menos claro", señaló.

En este sentido, dijo que, si lo que demanda de PNV "es estabilidad y horizontes claros, lógicamente", habrá que responderle desde lo que, para la formación jeltzale, "supone la estabilidad y el horizonte claro, que se cifra básicamente en el autogobierno vasco".

"Y ahí es donde nosotros queremos situar, en todo caso, el sentido de las conversaciones, si el Gobierno está interesado en mantenerlas de cara a un eventual apoyo a los presupuestos a partir del mes de septiembre", señaló.

No obstante, apuntó que, "a la luz de la respuesta que el grupo parlamentario socialista en el Congreso dio a las declaraciones de Iñigo Urkullu, parece que ni están muy interesados ni tiene prisa en ello, porque nos dijeron que las conversaciones iban a empezar a partir del mes de septiembre e iban a entablarse por igual con todos los grupos parlamentarios de la Cámara".

"Parece que, al que redactó esa nota, se le olvidó que, dentro de un mes, el 21 de julio, se debatirá y votará en el Congreso de los Diputados el objetivo de déficit y el techo de gasto, que es la puerta que permitirá o no abrir la tramitación de los Presupuestos, pero, si ellos no van a remangarse para trabajar con los grupos parlamentarios hasta el mes de septiembre, supongo que nos dejan a todos mano libre para que hagamos lo que queramos en julio", apuntó.

PROPUESTA DE URKULLU

Josu Erkoreka manifestó que, "a partir de las declaraciones de Iñigo Urkulllu", se estaría "en el terreno de la especulación". "Lo que el presidente del EBB ha querido hacer es no cerrar las puertas y lanzar un mensaje de disposición a explorar un terreno de trabajo en el que podría alcanzarse un acuerdo".

"Y ese terreno de trabajo, se sitúa en el ámbito más político que económico y tiene más que ver con las aspiraciones seculares, el autogobierno del PNV que, en este momento, se formulan o están empezando a articularse a través del Concierto Político y de estas propuestas que están saliendo desde el seno del partido", apuntó.

Según explicó, su pretensión es "situar la negociación en ese terrenos", esperarán "a ver si el Gobierno tiene el más mínimo interés en coger el guante y avanzar por esta ruta que acaba de marcar el presidente del EBB".

Preguntado por si puede la formación jeltzale "meter una cuña" entre el PSE-EE y el PP, reconoció que "eso nunca viene mal en la estrategia política actual, en un momento en el que el PSE y PP están juramentados para no provocar fisuras en la política vasca, más que en la medida en que esa fisuras les resulten interesantes al PP".

"Porque la experiencia está demostrando que los vaivenes de la relación entre el PSOE y el PP depende de que le interese o no al PP provocarlos", manifestó.

El portavoz del Grupo Vasco en el Congreso rechazó "poner sobre la mesa temas concretos" a negociar porque "sería especular en el vacío", en este momento, en el que el PNV "ha lanzado un mensaje suficientemente claro para que, quien esté dispuesto a tomar la oferta, la pueda comprender".

"Yo haría un ejercicio vacío y una pirueta si ahora empezara a hacer aportaciones concretas o a identificar posibles precios concretos. No hay nada desarrollado a este respecto en el seno del PNV, vamos a ver si el presidente Zapatero responde a nuestra llamada y se dispone a abrir esa negociación, esa relación en el marco que nosotros hemos definido", señaló.

En esta línea, dijo que, "si es que ocurre esto, y si expresa su disposición a hacerlo, empezaremos a trabajar en el terreno del autogobierno, que es donde nosotros situamos ahora el punto de gravedad central, en cualquier negociación con el Gobierno central".

A su juicio, "hace falta una respuesta por parte del Gobierno" porque "la oferta de Iñigo Urkullu se formuló con claridad esta semana, sin entrar en pormenores que no eran pertinentes en este momento procesal, pero se explicitó indubitadamente, todo el mundo lo comprendió y hace falta una respuesta por parte del Gobierno".

"Y hasta la fecha, lo único que hemos recibido fue esa nota en la que, con toda la frialdad del mundo, el grupo del PSOE del Congreso dicen que, hasta ahora no han negociado y que lo harán con todos por igual a partir del mes de septiembre. Bueno, pues si esto es así, hasta el mes de septiembre, todo el mundo tiene las manos libres, incluido el periodo en el que se va a desarrollar el Debate sobre el Estado de la Nación", manifestó.

PP

Josu Erkoreka aseguró que el PP "ha hecho guiños inequívocos durante las últimas semanas, en el sentido de recuperar una relación normalizada con el nacionalismo vasco que no se producía desde hace muchos años".

"Es un gesto positivo, que no tiene por qué tener significación política especial, pero que, en sí mismo es positivo, en la medida en que facilita o propicia un escenario normalizado de relaciones entre todas las fuerzas políticas, que tienen una cierta relevancia y una influencia en las instituciones", dijo.

En su opinión, "es un paso positivo que hay que reconocer en lo que tiene de aperturista y de superación de fases anteriores", en las que el PP, "por definición, decía que no entablaba relaciones con el discrepante político".

"Y, claro, en política, todos somos discrepantes, todos tenemos alguna diferencia que nos separa y, si se establece el principio de que no se negociará nunca nada jamás, con quien discrepa en asuntos políticos, pues esto condena a una formación política al ostracismo y a la sociedad, que es lo que, de alguna manera, le ha venido ocurriendo al PP desde la época de la mayoría absoluta de Aznar, y de manera especial, en Euskadi, con aquellas políticas excluyentes de María San Gil", concluyó.