VITORIA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
La posibilidad de que víctimas de abusos policiales acudan a los centros educativos para ofrecer su testimonio ha enfrentado este jueves a los partidos del Parlamento vasco, en el que EH Bildu, PP y UPyD --por motivos muy distintos-- han criticado esta medida, recogida en un plan de paz del Gobierno vasco, mientras que el PNV la ha apoyado y el PSE-EE la ha respaldado con cierta "cautela".
El Parlamento autonómico ha debatido este jueves sobre un plan aprobado este pasado martes por el Gobierno autonómico, que amplía un programa ya existente destinado a que víctimas de distintos tipos de vulneraciones de derechos humanos acudan a los colegios para contribuir a la deslegitimación de la violencia.
Hasta ahora, este proyecto --que se puso en marcha durante el mandato del PSE al frente del Ejecutivo vasco-- se limitaba a los damnificados por ETA y otros grupos terroristas, como el GAL. No obstante, con la reforma de este plan, también podrán acudir a los colegios que lo soliciten víctimas de abusos cometidos por fuerzas policiales o parapoliciales en el contexto de la lucha antiterrorista.
El debate en torno a este asunto había sido planteado por el parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, que había registrado una moción en la que denunciaba que este cambio "distorsiona" el programa original, cuya función principal era deslegitimar el terrorismo de ETA.
"TEORÍA DEL CONFLICTO"
Maneiro, que posteriormente había consensuado un nuevo texto con el PP --que no ha salido adelante-- ha asegurado que, con esta medida, el Gobierno autonómico sólo contribuye a alimentar "la teoría del conflicto", que "justifica" el terrorismo de ETA como "respuesta" a otras violencias.
En este sentido, ha afirmado que, a diferencia de lo que ocurre con la banda --cuya actividad ha recordado que siguen sin "condenar" importantes sectores de la sociedad-- "nadie defiende la tortura y los abusos policiales, por lo que no cree que sea necesario que víctimas de este tipo de vulneraciones de derechos humanos acudan a las aulas a deslegitimar esa violencia.
Este último argumento ha sido defendido también por el parlamentario del PP Iñaki Oyarzábal, que ha denunciado que el plan del Ejecutivo no es para "deslegitimar" la violencia, sino para "tranquilizar conciencias".
Por su parte, Maribel Vaquero (PNV) ha lamentado que haya quien pretende crear "enfrentamiento" con este debate, y ha rechazado "legitimar" a unas víctimas y no hacer lo propio con otras "en función del victimario".
"SIN CONSENSO"
La parlamentaria de EH Bildu Belén Arrondo se ha desmarcado del plan de testimonio de víctimas porque supone trasladar al sistema educativo la responsabilidad de una materia sobre la que aún no hay "consenso político". Además, ha defendido la necesidad de avanzar hacia una convivencia "sin vencedores ni vencidos".
Desde el PSE-EE, Mikel Unzalu ha asegurado que el reconocimiento de las vulneraciones de derechos humanos cometidas por las fuerzas policiales no debe utilizarse para "diluir" la gravedad del terrorismo de ETA. Por ese motivo, ha apoyado con "cautela" el plan del Gobierno.
PONENCIA DE PAZ
Finalmente, el Parlamento ha aprobado un texto conjunto del PNV y EH Bildu. La iniciativa, que ha salido adelante con el voto a favor de estos grupos y el rechazo del resto, destaca la importancia de la educación para promover la paz y la solidaridad con las víctimas.
Además, afirma que los asuntos referidos s la paz y la convivencia deben abordarse en la ponencia específica que sobre esta materia existe en la Cámara autonómica. Este foro, no obstante, permanece paralizado y actualmente sólo forman parte del mismo el PNV y EH Bildu.