Pastor le acusa actuar como "un señor feudal" y asegura que Gobierno vasco no puede "dilapidar 300 millones" para "caprichos personales"
BILBAO, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSE-EE en Bizkaia, José Antonio Pastor, acusó hoy al diputado general vizcaíno, José Luis Bilbao, de acudir a su reunión con el lehendakari, Patxi López, "con una carta a los Reyes Magos" para plantear "proyectos de carácter personal" e intentar "desdecirse de compromisos políticos e institucionales". Asimismo, aseguró que el Gobierno vasco no puede "dilapidar más de 300 millones" para "satisfacer los caprichos" de Bilbao, que actúa como "un señor feudal" y debería "replantearse su futuro".
Tras asistir a un acto electoral de los candidatos socialistas Ramón Jáuregui y Eider Gardiazabal en Bilbao, Pastor se pronunció, de esta manera, en relación al encuentro que ayer mantuvieron el lehendakari, Patxi López, y el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, y que, a su entender, el máximo dirigente de la Diputación vizcaína "lo hizo más bien en representación del PNV" que de los ciudadanos de este territorio histórico.
Tras asegurar que los vizcaínos "no nos merecemos un diputado general como éste", censuró que Bilbao "se presenta en Lehendakaritza con una carta a los Reyes Magos que jamás había hecho con el anterior lehendakari" para plantear "proyectos de carácter personal" e intentar "desdecirse de compromisos políticos e institucionales" como la cofinanciación del Metro e "incumplir el pacto presupuestario" con los socialistas vizcaínos, que incluye entre sus partidas la construcción de la línea 4 entre Rekalde y Plaza Moyua.
Pastor consideró que la actitud del diputado general de Bizkaia iba dirigida, "probablemente, a tapar sus propias vergüenzas porque, si algo ha identificado la gestión del señor Bilbao, es el engaño permanente a los ciudadanos vizcaínos y el fracaso de todas sus apuestas", como el 'Caso Azpiegitura', en el que se tendrá que pagar "una cantidad importante de millones en indemnizaciones"; el parque tecnológido de la Margen Izquierda, que "jamás se puso en marcha"; el Plan foral de Vivienda, que "ha resultado un absoluto fracaso"; o el 'Caso Habidite', que ha puesto "en una situación tremendamente delicada" a la Diputación.
El dirigente socialista cuestionó "qué credibilidad y solvencia puede tener un representante institucional que actúa como un señor feudal y se permite el lujo de desdecirse de compromisos institucionales".
Asimismo, emplazó a Bilbao a explicar si, desde el punto de vista de inversiones estratégicas, "es más importante un campo de fútbol o un museo fantasma en Urdaibai" que facilitar un transporte público como el Metro que "ha sido siempre una de las grandes apuestas estraégicas y de revitalización económica del país".
Para José Antonio Pastor, Bilbao "no pasa la prueba de diputado general" y, por tanto, debería "plantearse muy seriamente su futuro político".
El líder de los socialistas vizcaínos recordó que "los compromisos con el Metro no son una apuesta personal de un señor", sino "un compromiso de la Diputación que se arrastra desde antes de que Bilbao fuera diputado general, que se hizo con el Gobierno vasco en su día, y que el capricho personal de una persona no puede tirar por tierra".
NECESIDADES SOCIALES "ENORMES"
En este contexto, destacó que "es difícil explicar a los ciudadanos que, en una situación de crisis, se le dé primacía a un museo que no está avalado por nadie -ni por el anterior gobierno ni por su partido-, o por un campo de fútbol, y se dejen de invertir en temas de interés ciudadanos como el Metro de Bilbao".
De este modo, indicó que el Gobierno vasco "no se puede permitir el lujo de destinar fondos, cuando hay necesidades sociales enormes que hay que cubrir" porque "no es de recibo que tengamos que dilapidar más de 300 millones de presupuesto público para satisfacer caprichos personales de un señor".
Finalmente, Pastor se preguntó "qué garantías políticas tenemos en este territorio si el diputado general, en función de cómo se levante cada mañana, decide si cumple o no sus compromisos y lleva los pactos adelante o se desdice", como ya hizo con la Torre de Iberdrola, "estando a punto de poner en riesgo incluso la propia salud financiera de Ría 2000".
"Y ahora pretende jugar con los vizcaínos, engañándoles nuevamente y tratando de llevar sus frustraciones personales y las de su partido a la arena política en una reunión con el lehendakari", concluyó.
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