PSE no rechaza un futuro proceso con bases "diferentes" que parta del anuncio de ETA de abandono de la violencia

Actualizado: viernes, 12 enero 2007 13:44

López pregunta a la izquierda abertzale qué ha hecho para mantener el proceso y le acusa de "alimentar" su crisis

BILBAO, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PSE-EE, Patxi López, afirmó hoy que no niega la posibilidad de que en el futuro pueda haber otro proceso, con bases "diferentes" que deben "nacer de la evidente manifestación de ETA de su desaparición" y ser "mucho más explícitas" en el abandono de la violencia y cuestionó a la izquierda abertzale "qué ha hecho ellos" para mantener el proceso de paz, acusándoles de "alimentar" su crisis.

En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, López aseguró que, tras el atentado de ETA en Barajas, el proceso de paz está "roto" y manifestó que todos los partidos han coincidido que el proceso necesita como "condición básica e imprescindible la ausencia de atentados, la ausencia de violencia".

El dirigente del PSE-EE añadió que el diálogo, "que debe acompañar cualquier camino hacia la paz", necesita también "como condición mínima imprescindible la ausencia de violencia". Por ello, manifestó que "quien pone las bombas en Barajas dinamita y entierra en sus escombros el proceso de paz y las condiciones para el diálogo".

López señaló que, después de lo que ocurrido con un alto el fuego permanente declarado, "no es creíble que se diga que se mantienen las condiciones del alto el fuego". "No hay alto el fuego que permita poner bombas, por lo tanto, las bases para el final de la violencia en el futuro tendrán que ser otras", añadió.

En este sentido, señaló que en el futuro las bases para el final de la violencia tendrán que "nacer de la evidente manifestación de ETA de su desaparición" y afirmó que no niega que en el futuro pueda haber otro proceso, "con otras bases diferentes", que tienen que ser "mucho más explícitas en el abandono de la violencia por parte de ETA".

López indicó que, al principio del proceso, todos excepto el PP creyeron que tenía "bases sólidas". Tras recordar que también se había dado la declaración de Anoeta, aseguró que pensaban que había "unas bases diferentes" porque "no nacían de la exigencia de la independencia, de la autodeterminación, de la territorialidad", sino "simplemente del convencimiento de que la violencia no lleva a este país a ninguna parte más que al dolor, al sufrimiento y a la clandestinidad de ese mundo".

"Se trataba también de integrar al mundo que ha vivido al margen de lo que es el Estado democrático y de Derecho en la democracia que es generosa e integradora, pero claro, si se cumplen los principios de la democracia y el Estado de Derecho, cosa que no han hecho", aseguró.

Preguntado por las causas de la ruptura del alto el fuego, indicó que lo que habido es un "cambio radical en las posiciones y en los posicionamientos de ETA y de la izquierda abertzale, "que nacen de un alto el fuego sin condiciones, ni condicionantes políticos" y, posteriomente, empiezan a aparecer comunicados "con condicionantes políticos, de territorialidad, de Navarra o de autodeterminación".

López recordó que los "demócratas siempre han dicho que no están dispuestos a pagar precio político por la paz pero sí a establecer un diálogo que permita el abandono de las armas y el fin definitivo de la violencia". El dirigente socialista insistió en que son "ellos los que cambian los planteamientos" y, por lo tanto, "los que engañan, no al Gobierno, sino a toda la sociedad vasca y española". "La pregunta habría que dirigírsela a ese mundo, por qué han cambiado", añadió.

A su entender, el Gobierno central no ha cometido ningún error porque "no hay error en intentar conseguir la paz y no hay error cuando uno cree que hay unas bases para intentarlo, hacer todo lo posible para conseguir acabar con el mayor problema que hemos tenido en este país". Asimismo, afirmó que, en ese tiempo, no han hecho "dejación" de los "principios del Estado de Derecho y de la democracia".

El dirigente del PSE aseguró, en relación a las críticas de la izquierda abertzale y a "los órdagos que lanza a los demás", que el Gobierno central ha hecho "lo que tenía que hacer, mantener el Estado de Derecho y decir que abría la posibilidad del diálogo para conseguir el abandono de la violencia".

En este sentido, se preguntó qué es lo que ha hecho la izquierda abertzale, "que ha estado alimentando durante todo este tiempo la crisis del proceso de paz". A su juicio, ha estado "todo el día poniendo obstáculos, diciendo que era inviable".

"Qué han hecho ellos, ahora dicen que es más necesario que nunca, pero qué han hecho para mantener el proceso de paz, qué han hecho después del atentado para mantener el proceso, ¿decir que volvamos a la situación anterior, en la que un alto el fuego permite poner bombas y matar gente? Eso es impresentable", criticó.

ASUMIR SU RESPONSABILIDAD

En este sentido, aseguró que "lo que tiene que hacer es asumir de una vez por todas la responsabilidad que le corresponde" y agregó que, "si alguien dice que apuesta por un proceso político, democrático, como dicen ellos, tienen que entender que la política es incompatible con la violencia, y tienen que alejarse, rechazar, condenar, salirse del mundo de la violencia".

"Y la democracia integra porque es generosa, pero a quien quiere integrarse en democracia, y para integrase en democracia solo hay que asumir los principios de la democracia, cumplir las reglas del juego", indicó, cuestionando "¿qué han hecho ellos para mantener el proceso de paz".

López negó "rotunda y categóricamente" que ningún dirigente socialista vasco haya mantenido contactos "ni formales, ni informales" con la izquierda abertzale después del atentado e insistió, en referencia al último comunicado de ETA, en que "no ha habido ningún tipo de compromisos" por parte del Gobierno. De esta manera, instó a que "digan qué compromisos han incumplido: ninguno, porque el alto el fuego no nace de ningún tipo de compromisos".

El dirigente del PSE opinó que, a partir de ahora, corresponde "a todos los demócratas" mantener una unidad para hacer frente a la violencia y al terrorismo, "la fortaleza" del Estado de derecho, y recuperar "el empuje" de la sociedad para seguir manteniendo el convencimiento de que "más pronto que tarde acabaremos con la violencia". "Todos juntos seremos más fuertes para conseguirlo", apeló.

FINAL DIALOGADO

En cuanto al pacto Antiterrorista, se mostró convencido de que contiene dos objetivos que "pueden ser compartidos por todo el mundo": el del Estado de derecho frente al terrorismo y el de sacar de la "confrontación política" la política para combatirlo. A su entender, en estos momentos, "no tiene mucho sentido mucha de su literatura", como el preámbulo "escrito en un contexto que no tiene nada que ver" con el actual.

Para López, "los objetivos y la filosofía" de este pacto "los mantenemos todos" a excepción del PP porque usa "constantemente" la política antiterrorista en su estrategia política, "que sólo es una: utilizar esto para atacar al Gobierno socialista y a José Luis Rodríguez Zapatero". "Quienes no firmaron el Pacto Antiterrorista a veces lo cumplen más que quien dice defenderlo", añadió.

Preguntado por si se debe mantener la esperanza en un final dialogado, indicó que la esperanza es "un sentimiento particular que nunca no deberíamos abandonar" y agregó que se debería tener el convencimiento de que se acabará la violencia. Finalmente, destacó que "lo del final dialogado no es un invento que se haya hecho en estos días o que haya hecho el Gobierno de Zapatero, es algo quelos partidos democráticos rubricamos en el Pacto de Ajuria Enea". "Ojalá llegue cuanto antes", concluyó.