BADAJOZ, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
La artista extremeña Isabel Flores (Hornachos, 1989) expone estos días en la sala Vaquero Poblador (El Hospital-Centro Vivo) de Badajoz, su muestra 'Entre un espacio y otro'.
Un viaje a través de lo abstracto en el que el ornamento es el protagonista. "Esas formas ornamentales, con su capacidad expansiva, me llevan al textil, a pintar a través de la técnica de la serigrafía".
Como resultado, Flores ha recuperado diversos patrones extraídos de lugares cotidianos y los ha plasmado en enormes tejidos, combinados con piezas de forja, cerámica o murales, que envuelven todo el espacio de la muestra.
"El 90 por ciento de las casos extraigo la forma de la cerámica, pero ya no en forma de azulejo, sino una pieza que en sí mismo es un ornamento", ha apuntado en declaraciones a Europa Press Televisión.
UNA OBRA QUE 'ENVUELVE' AL ESPECTADOR
Así, a través de una mirada interdisciplinar, la autora propone un universo interactivo y de contemplación, como parte de un ejercicio creativo, en el que la obra de arte trasciende la sala expositiva, a la vez que la contiene, con una "intervención total" del espacio. "Lo que quiero hacer es abarcar todo el espacio, que el espectador se sienta dentro de la pintura de alguna manera.
Que pueda percibir esa sensación envolvente con el tejido", ha explicado la autora. Y es que la artista asume el ornamento como un espacio de relaciones y confluencias entre diferentes materiales entendidos como opuestos pero, que en su conjunto, entablan un diálogo.
"Empezar a pensar cuál es la manera de relacionarse las obras entre sí, las piezas y la exposición entera con el espacio, e incluso, de qué manera nos relacionamos socialmente", ha apuntado Isabel.
Se trata de una exposición individual, comisariada por Ana Gabriela Ballate y Yadiera de Armas, con múltiples significados implícitos. "Esa relación que se establece entre ornamento y abstracción, arte y artesanía o diseño y decoración", ha argumentado Flores.
Una muestra llena de color que atrae las miradas del público. "El color siempre va ligado al ornamento y es algo común en los azulejos que tenemos en casa. Te va dirigiendo la mirada, te invita a transitar el espacio y buscar diferentes puntos de vista. A mirar a través del tejido y de su semitransparencia y generar nuevos diálogos a través de estas piezas", ha finalizado la artista.
Un recorrido a través de lo abstracto, de formas infinitas que crean espacios envolventes, y del que se podrá disfrutar hasta el próximo 1 de noviembre.
