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MÉRIDA, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Educación, Eva María Pérez, señaló hoy que la gratuidad de los libros de texto para todos los alumnos de ESO de Extremadura será posible a través de un "sistema de banco de libros" en cada uno de los centros educativos que se irá renovando parcialmente a medida que los ejemplares se deterioren.
Según explicó hoy Pérez a los medios de comunicación en la inauguración de la exposición 'Los desastres de la guerra' de Goya en la Escuela de Arte de Mérida, el pasado viernes se llevó a Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura el decreto de Apoyo Socioeducativo en el que se incluyen las ayudas para la compra de libros de texto.
Además, avanzó que este año habrá una única convocatoria, en lugar de dos, procedentes del Ministerio de Educación y de la Consejería de Educación, con lo que se facilitará "considerablemente" el trabajo para los centros educativos.
En cuanto al "banco de libros", la consejera señaló que se trata de un nuevo modelo que pretende extender en tres años la gratuidad de los libros de texto a todos los alumnos de ESO de los centros de la región.
El modelo, apuntó, se realiza mediante ayudas a los centros educativos, que son quienes a través del consejo escolar y en función de una serie de criterios decidirán a qué alumnos se les prestan los libros. Una vez finalizado el curso, esos libros quedan "en depósito" en el centro, con lo que se va creando un banco de libros que permitirá extender en tres años la gratuidad "a todo el alumnado extremeño" de ESO.
Pérez destacó además que este sistema pone en práctica la "sostenibilidad y la propiedad social de los libros", de forma que exista una "responsabilidad" por parte de los alumnos en el cuidado de los libros de texto.
Aclaró que, en un primer momento, las ayudas para la gratuidad se destinarán a "ayudas a familias con pocos recursos y familias numerosas", y se irán incrementando progresivamente para que "en un plazo de tres años" las ayudas se extiendan a todos los alumnos de secundaria.
En cuanto a la posibilidad de que puedan desaparecer establecimientos de venta de libros si las familias dejan de comprarlos, la consejera dijo que "no hay diferencia". Indicó que hay los mismos alumnos y lo único que que cambia es que "ahora la extensión de la gratuidad será para más alumnos". "Si antes los compraban las familias, ahora los compran los centros", añadió.