MÉRIDA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
Extremadura alcanzó el pico máximo de incidencia a los 14 días de coronavirus en esta segunda oleada el pasado 25 de septiembre, fecha desde la que se están produciendo "indicadores claros" de que la comunidad se encuentra en "fase de estabilización o descenso".
Así lo ha avanzado el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, en una comparecencia este sábado en Mérida para informar sobre la evolución de la pandemia, en la que ha expuesto datos que indicaría que, salvo "rebrote o brote concreto", Extremadura doblegó la curva el pasado 25 de septiembre.
Unos datos que, según ha señalado, coinciden con los que proporciona el Ministerio de Sanidad, aunque ha advertido, no obstante, que "con este virus nunca se sabe, nada previsto y encima de él constantemente".
De este modo, ha señalado que el pasado 24 de septiembre la incidencia acumulada a los 14 días en la comunidad era de 290 casos por cada 100.000 habitantes. Cifra que ha ido descendiendo desde entonces, hasta situarse en 255 este pasado viernes, 2 de octubre, y en 235,8 casos este sábado, día 3, estando además en todo momento por debajo de la media nacional.
A esto se suma que la incidencia acumulada a los 7 días se sitúa por debajo del 50 por ciento de la incidencia a los 14 días, lo cual supone un "signo precoz de que está claramente en estabilización o tendente a la reducción". A día de hoy, la incidencia acumulada a los 7 días es del 40% de la registrada a los 14 días.
Asimismo, ha detallado que en Extremadura se han realizado desde el inicio de la pandemia 200.348 pruebas PCR, que han ido "bajando claramente" la positividad hasta situarse en el 10,7%, lo cual, no obstante, es aún más del doble de la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es del 5%, pero en cualquier caso también por debajo de la media nacional, aunque aun todavía al doble de la OMS (5%) en el 10,7%, pero en cualquier caso debajo de la media nacional
