MÉRIDA 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La formación política Los Verdes de Extremadura considera que el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, "está haciendo el ridículo con su insistencia en confundir la contaminación con un derecho".
Según indicó Los Verdes de Extremadura, esta confusión se debe "a un desesperado intento de justificar varios proyectos industriales muy contaminantes en la región, tales como varias centrales térmicas y, sobre todo, una refinería de petróleo, insostenible desde el punto de vista ambiental e inviable desde el punto de vista económico".
Aseguró la formación política, que cuando el resto del mundo "ya se ha dado cuenta de que la contaminación es un problema y habla de buscar soluciones, Guillermo Fernández Vara ha llegado a reivindicar en Bruselas este supuesto derecho a contaminar más".
Así, apuntó que ahora el dirigente político extremeño "se dispone a hacerlo en el Congreso Federal del PSOE en Madrid, en un alarde de ignorancia en materia medioambiental" que, en opinión de Los Verdes, transmite una "mala imagen de Extremadura al exterior, una imagen que tiene mucho que ver con los viejos tópicos sobre la región".
La contaminación "no es un derecho, es un perjuicio, un mal que causa la muerte de cientos de miles de personas todos los años por la inhalación de sustancias tóxicas", aseguró Los Verdes.
Además, apuntó que la emisión de gases de efecto invernadero "tampoco es un derecho, sino la causa del cambio climático, que es un problema de todos y que no entiende de fronteras ni de cuotas de emisión, y que desde luego no se combate emitiendo ahora todo lo que no se ha emitido antes".
Puesto que para esta formación política lo que dice Fernández Vara es que, "como Extremadura no ha causado tanto daño como otros territorios, debe causarlo ahora, a contra corriente del Protocolo de Kyoto".
Lo "único positivo" que Los Verdes extrae de las palabras de Fernández Vara sobre el "derecho a contaminar, en el que parece mezclar la contaminación química con las emisiones de gases de efecto invernadero, es que viene a admitir implícitamente que la refinería sí es una industria altamente contaminante, además de una verdadera fábrica de cambio climático".