Unas 100 personas se concentran en Vigo para protestar contra el intrusismo en la seguridad privada

Actualizado: viernes, 24 agosto 2007 16:22

Los sindicatos reclaman que las sanciones a las empresas incumplidoras "se ejecuten con rigor y cuanto antes"

VIGO, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

Alrededor de 100 personas se concentraron hoy ante la sede viguesa de la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra para protestar contra el intrusismo en la seguridad privada y pedir el "rigor" en el cumplimiento de la ley que rige el sector. Así, mantuvieron un minuto de silencio en memoria del joven fallecido el pasado día 15 en Mos, que murió tras recibir dos disparos cuando realizaba labores de vigilancia.

Representantes de los sindicatos UGT, CC. OO y CIG, vigilantes de seguridad, auxiliares y familiares del joven fallecido, Xosé Álvarez Nión, participaron en esta reivindicación en la que portaron una pancarta con el lema 'Los responsables a la cárcel y los irresponsables en los despachos ¡La inseguridad nos mata!'.

Además, cortaron el tráfico en la calle García Barbón, entre las inmediaciones de la Subdelegación y el cruce con Colón, durante alrededor de 20 minutos, donde realizaron el homenaje al trabajador fallecido.

En declaraciones a los medios, el responsable de Seguridad Privada de UGT, Enrique Rial, destacó que la protesta convocada responde a que el sector está "hasta las narices" de que la Administración "no haga nada" para resolver el problema del intrusismo laboral por el que personas sin la pertinente titulación realizan labores de vigilancia, con el consiguiente peligro que supone para sus vidas.

Así, alertó de que, de los 1.200 empleados como auxiliares de servicios, alrededor de un 70% desempeña su labor como vigilante, mientras que "hasta el 80% de este tipo de empresas no están vinculadas a empresas de seguridad".

Por su parte, el representante de la CIG, Pedro Pérez, destacó que la Subdelegación conoce la situación, puesto que los sindicatos han presentado un total de 200 denuncias en las que prueban que personal contratado como auxiliar desempeña labores propias de vigilancia, de las que "debido a la escasez de personal sólo el 20% terminaron en sanción".

SANCIONES

Los representantes de los sindicatos también se refirieron a la postura de la Subdelegación sobre el caso del joven Xosé Álvarez de sancionar a la empresa para la que trabajaba Servimax, así como a la contratante del servicio, Pórtico, y pidieron no sólo que se impongan, sino que "se ejecuten con rigor y cuanto antes", según concretó Pérez.

En este sentido, consideró que las medidas dan la razón a los sindicatos, que exigen responsabilidades a la Administración, para que vele por el cumplimiento de la ley, así como a las empresas que prestan estos servicios y a las que los contratan.

Además, destacó que "en la mayoría de los casos las sanciones son nimias", de unos 30.000 euros, y además, las empresas suelen interponer recursos, por lo que las denuncias "quedan en un cajón". Según Pérez, en otras ocasiones, las compañías multadas cambian de nombre y continúan desarrollando los mismos servicios.

Según confirmaron fuentes de este departamento a Europa Press, el expediente para estas sanciones, que serán muy grave y grave, en cada caso, se abrirá el próximo lunes, momento en el que se estipularán las cantidades que se impondrán.

Sin embargo, los sindicalistas destacaron que, en el caso de Pórtico, "a día de ayer tenía a dos auxiliares haciendo la ronda" en las naves del polígono de O Rebullón, en Mos, en el que falleció el joven vigués. Así, reiteraron su intención de movilizarse ante las instalaciones de Servimax, Pórtico y todas las empresas de servicios que vulneren la Legislación de seguridad privada, al ofrecer personal no cualificado.

En este sentido, el vigilante de seguridad titulado Néstor Armesto recordó que la normativa obliga a que los polígonos industriales estén vigilados por dos profesionales titulados que, además, vayan provistos de arma.

DESCONOCIMIENTO

Por su parte, la auxiliar de empresa de servicios, Sindi Sampedro, achacó el intrusismo laboral "al desconocimiento general y del propio trabajador" de las atribuciones que tiene en su puesto de auxiliar. En este sentido, explicó que "no existe" la categoría de auxiliar de vigilancia y que, en su caso, la de "auxiliar de empresa de servicios" pueden apoyar la labor de un vigilante junto al que trabaje "sin inmiscuirse" en las atribuciones de éste.

Además, explicó que este sector, en el que lleva trabajando cuatro años aunque sin realizar las*tareas encubiertas que denunció, "la gente rota continuamente" por lo que, sobre todo los jóvenes, ignoran que no deben realizar labores de vigilancia que, desde su empresa, "se les dice que tienen que hacer, que no pasa nada, porque las hace todo el mundo".

Por ello, culpó a las empresas de la situación de intrusismo laboral ya que consiguen abaratar costes, ya que el sueldo de un auxiliar es alrededor de la mitad de un vigilante. "Es una pena que se jueguen la vida por 600 euros", lamentó.

Así, pidió a los trabajadores del sector "que se fijen en sus contratos y en sus convenios" para saber cuáles son las responsabilidades que les corresponden, así como sus derechos. "Cada vez son más los que se niegan", explicó, al tiempo que reconoció que entre algunos de sus compañeros hay "miedo" de que vuelva a ocurrir una muerte en el sector.