Negocian unas bases programáticas similares a las establecidas para el bipartito en 2005 pero más escuetas en sus objetivos
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las direcciones de PSdeG y BNG impondrán a los candidatos municipales en los casi 90 ayuntamientos en los que las elecciones del 27 de mayo abrieron posibilidades de acuerdos, que cumplan el pacto de gobernabilidad local que rubricarán sus máximos dirigentes y que tiene como objetivo plasmar un "mandato claro e inequívoco" decretado por las urnas de "compartir gobierno" en las instituciones municipales y apartar al PP del máximo número posible de alcaldías.
Este es uno de los primeros compromisos a los que han llegado ambas formaciones durante el proceso de negociación que llevan a cabo desde ayer y que han continuado en la mañana de hoy. Así, los dos grupos acordaron permitir en las corporaciones locales dos posibles fórmulas en los casos en los que el gobierno de las alcaldías dependa de los votos de unos u otros: pactar gobiernos de coalición o garantizar la gobernabilidad en el ayuntamiento prestando los votos para la investidura del candidato, sea del PSdeG o del BNG, en función de cuál haya sido el más votado.
Con estas directrices de "obligado cumplimiento", las direcciones nacionalista y socialista pretenden cerrar las puertas a los casos en los que las disensiones que existen en ayuntamientos como Foz, Vimianzo, Corcubión, O Carballiño, Chantada o Boiro rompan la alianza para apartar al PP "del máximo número posible de alcaldías".
Por ello, y a pesar de los enfrentamientos que existen en algunos ayuntamientos, las direcciones socialista y nacionalista obligarán a los dirigentes locales de cada formación a cumplir el pacto. "Hay que llevar la disciplina de voto a rajatabla", apuntaron fuentes presentes en las negociaciones consultadas por Europa Press.
CÁLCULOS
En la primera toma de contacto de ayer, las comisiones negociadoras de PSdeG y BNG intercambiaron documentación acerca de las alcaldías que conseguirían en virtud del pacto de gobernabilidad. Así, el BNG que obtuvo ocho mayorías absolutas en las elecciones del 27 de mayo, aspira a que el pacto con el PSdeG coloque a alcaldes nacionalistas al frente de nueve ayuntamientos en los cuales fueron la lista más votada y otros 11 en los cuales acabaron como segunda fuerza.
Los socialistas aspiran a que el pacto con el BNG les permita sumar a sus 39 mayorías absolutas, el control de 30 alcaldías de municipios en los cuales fueron la lista más votada el pasado domingo, además de otras 27 alcaldías en las cuales fueron la segunda candidatura más votada, pero que con los votos de los concejales nacionalistas sumarían mayoría absoluta en la investidura de sus candidatos.
INDEPENDIENTES
Frente al mandato de obligado cumplimiento en las alcaldías que dependen bien de los votos o bien de la abstención de los dirigentes locales, ambas formaciones no serán tan severas en aquellas localidades en las que el pacto dependa de independientes.
"Habrá manga ancha", apuntaron las fuentes consultadas al subrayar que sus dirigentes locales tendrán "cierta libertad" para adoptar acuerdos con otras fuerzas y cerrar la puerta al PPdeG. Así, expusieron que estas negociaciones se llevarán de una forma "más individualizada" en función de los intereses políticos en cada municipio.
Así, a mayores de las casi 60 alcaldías con las cuales quiere hacerse el PSdeG y la veintena que acabaría en manos del BNG en virtud del pacto de gobernabilidad, socialistas y nacionalistas podrían incrementar su cuota de poder local mediante negociaciones con terceras fuerzas.
Así, el PSdeG tiene contabilizados hasta 19 consistorios en los cuales podría hacerse con el bastón de mando mediante negociaciones con listas de independientes o partidos como Terra Galega o el Partido Galeguista. Este es también el caso del BNG, que podría situar a sus candidatos al frente de cinco corporaciones en las cuales fue segunda lista más votada pero tiene que negociar varios apoyos.
Además, socialistas y nacionalistas tienen computados 14 ayuntamientos en los que sus votos podrían sumarse a los de independientes para apartar del poder al PP. Ambos partidos también han planteado negociaciones con el PP en Toques (A Coruña) para apartar del poder a Jesús Ares, que se presentó al frente de una lista independiente tras ser expulsado de las filas populares debido a su condena por abusos a una menor.
En algunos de estos municipios, que también fueron analizados durante las negociaciones, tanto nacionalistas como socialistas podrían gobernar sin apoyarse. Una situación en la que se encuentran otros ayuntamientos en los que ni una ni otra formación tienen mayoría, pero en la que PSdeG o BNG fueron la fuerza más votada y pueden acabar ostentando la alcaldía por falta de acuerdo entre el PP y partidos independientes de derecha, como es el caso de O Porriño o Ponteareas.
PACTO PROGRAMÁTICO
En la reunión de hoy también se abordó el contenido programático del futuro pacto, un asunto en el que los nacionalistas son más incisivos. Así, ambas formaciones estarían dispuestas a llegar a un acuerdo similar al alcanzado para la Xunta en 2005, aunque más escueto en sus objetivos, y que también sería de "obligado cumplimiento" para los ayuntamientos con gobiernos conjuntos.
Según las fuentes consultadas, el pacto contendría unas "orientaciones programáticas comunes" para asegurar la gobernabilidad en los ayuntamientos y visualizar que el cambio iniciado en la Xunta "también es posible llevarlo a cabo" en el ámbito local.
El BNG apuesta por que estas "cláusulas mínimas" hagan referencia al impulso del empleo y de las políticas sociales, la potenciación del idioma gallego, el urbanismo o el papel de las diputaciones. No obstante, el PSdeG aboga por acordar un marco programático "general" y no entrar "en claves específicas".
Así, son los nacionalistas los que se muestran especialmente incisivos con este asunto y pretenden que el pacto final refleje "claramente" un acuerdo de objetivos para el conjunto de los ayuntamientos en los que gobiernen. Por su parte, los socialistas hablan de unas líneas programáticas generales sin limitarse a áreas concretas.
Por ello, y a pesar de que las reuniones van a "buen ritmo", ambas formaciones se han dado más tiempo para reflexionar con el objetivo de poder alcanzar un acuerdo la próxima semana. "Seguimos el guión previsto. Lo que no puede ser es que en dos reuniones lleguemos ya a un acuerdo", apuntaron las fuentes consultadas.
De esta forma, las comisiones de PSdeG y BNG se volverán a reunir a lo largo de todo el fin de semana para intentar cerrar los detalles del pacto. "El objetivo es llegar a un buen acuerdo que no será ni sencillo, ni fácil", concluyeron.
