SANTIAGO DE COMPOSTELA, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
La sección sindical en el Centro Penitenciario de Teixeiro de la Agrupación de los Cuerpos de la administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) denunció hoy que se requisó en la prisión coruñesa de Teixeiro una docena de "pinchos" en diez días en dos módulos destinados a internos "muy peligrosos".
"Una vez más el tiempo ha corroborado las denuncias de Acaip", lamentó el sindicato, al tiempo que recordó que en diciembre había denunciado la "relajación de las medidas de seguridad y control" sobre los internos más peligrosos "por parte de los responsables de seguridad del penal". "Esta política finalmente ha acarreado un aumento desmesurado de la conflictividad en los dos módulos de primer grado", añadió.
El sindicato de prisión señaló que "la tensión comenzó acrecentarse" el 1 de enero "cuando un interno magrebí agredió a otro salvajemente en el modulo destinado a los internos más peligrosos". Añadió que el 5 de enero un tercero de nacionalidad iraquí incendió el colchón de su celda y trató de que el resto de internos colaboraran en su intento de motín, "consiguiendo sólo ser secundado por otro interno".
Acaip puntualizó que ambos presos destrozaron sus celdas al tiempo que iban armados con varios "pinchos" que "no dudaron en utilizar contra los funcionarios. "Los incidentes fueron realmente graves y pudieron ser más graves aún, dado que al intentar apagar el fuego de la celda el sistema contra incendios no funcionaba, simplemente por que no había agua", añadió.
Finalmente, según precisó el sindicato, "se pudo controlar la situación" y "afortunadamente tan sólo varios trabajadores tuvieron que ser atendidos por pequeñas contusiones e intoxicación leve". Al respecto, Acaip lamentó que los responsables de seguridad del penal "no sólo no asumen su responsabilidad en los hechos, sino que veladamente acusan de falta de profesionalidad a los funcionarios a la hora de los registros y cacheos de estos internos".
CARENCIA DE MEDIOS
Por ello, Acaip sostuvo que "es del todo intolerable" y resaltó la "carencia de medios adecuados" para detectar esas armas y lamentó las directrices "que emanan desde estos propios responsables" y que, a su juicio, "prácticamente autorizan todas las demandas de los internos, permitiendo que estos acumulen numerosas pertenencias en sus celdas".
"El que se hallan requisado todas estas armas es precisamente gracias a la profesionalidad de los funcionarios, los cuales en muchas ocasiones se juegan hasta su propia integridad física para ello", concluyó Acaip.