VIGO, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, manifestó hoy su voluntad de dejar "en el ámbito del incidente" los hechos ocurridos ayer por la tarde en la playa de Samil, donde un grupo de militares de la OTAN irrumpieron con varias lanchas en la zona de baño del arenal. Así, aseguró que el hecho de que el cónsul de Dinamarca y los comandantes de los buques a los que pertenecen los marinos acudan por "iniciativa propia" a entrevistarse con él, y "seguro que a pedir disculpas", servirá para zanjar la cuestión, sin que el Ayuntamiento tome otro tipo de medida.
En declaraciones a los medios efectuadas durante una visita a las obras de humanización en el barrio de Coia, previa a la reunión con los representantes militares y diplomáticos, Caballero afirmó estar "muy disgustado" por unos hechos que calificó como "desagradables y desafortunados".
Asimismo, destacó que los militares del Reino Unido, Holanda y Bélgica que realizaron maniobras peligrosas en cuatro lanchas impulsadas por hélices --una de ellas también llevaba una moto acuática--, "molestaron" a los ciudadanos y crearon una situación de "cierto riesgo".
Recordó también que estas personas --que fueron identificadas por la Guardia Civil-- invadieron una zona que estaba perfectamente señalizada, por lo que "crearon un riesgo innecesario" durante un gran espacio de tiempo, aproximadamente unas tres horas.
NEGATIVA
Caballero recordó que el Policía Local constató el peligroso comportamiento de los tripulantes de las lanchas y dio aviso a Protección Civil, cuyos efectivos se acercaron hasta los militares para pedirles que abandonaran la zona, a lo que hicieron caso omiso. Ante esta situación, según afirmó el alcalde, se dio aviso a los propios mandos militares --que se personaron en la zona--.
Sin embargo, "en la medida en que no fueron con la velocidad y premura necesarias para quitar las lanchas de allí", se dio aviso a la Guardia Civil del Mar, que acudió al lugar y pidió la retirada de estas personas, que en ese caso accedieron sin oponer resistencia.
A sí, Caballero aseguró que la reunión de hoy a la que acude el cónsul danés --por ser una nave de este país la que comanda la flotilla de la OTAN atracada en el Puerto de Vigo-- y los responsables de los buques servirá para manifestar el "disgusto" del Ayuntamiento ante los hechos y por la "negativa" inicial de los militares a abandonar su comportamiento.
Por ello, pedirá "encarecidamente" que se "ejerza el control" para evitar que sucesos como éste vuelvan a repetirse. Así, recordó que el ejército de la OTAN es "amigo" y añadió que "se puede entender que ocurra algún incidente, pero no de esta envergadura", puesto que pudo haber causado algún tipo de daño.
Finalmente, en cuanto a una posible sanción a los militares involucrados, destacó que se trata de un asunto de "jurisdicción militar" y, por tanto, será en este ámbito donde se tomen las decisiones que correspondan.