Amnistía Internacional detecta "un importante incremento del racismo" en Galicia que "no se refleja en las estadísticas"

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la ONG Amnistía Internacional, Itziar Ruiz-Giménez, denunció hoy que se produjo "un importante incremento de la xenofobia" en Galicia que supone "un gran reto" para la actividad de la organización, ya que "no existen estadísticas oficiales sobre denuncias de casos de racismo" a pesar de que se trata de una exigencia de la Agencia Europea de Derechos Humanos.

En declaraciones a Europa Press, Itziar Ruiz-Giménez, que recogerá mañana en Santiago el premio 'Portapaz 2008' por parte del Seminario Galego de Educación pola Paz (SGEP), demandó "medidas concretas" a la Administración gallega para paliar una "discriminación" en materia de educación y acceso a la vivienda "que se da sobre todo hacia la población gitana".

Precisamente, explicó que este colectivo "ocupa los puestos de trabajo más inseguros" y "de los peores salarios", además de sufrir "malos tratos por parte de agentes del Estado" que "han quedado impunes" por la falta de "medidas de investigación efectiva".

Por otro lado, consideró la decisión del SGEP de otorgar el premio 'Portapaz' a Amnistía Internacional como un "enorme reconocimiento a la labor de los últimos 30 años --la ONG los cumplió el pasado 2008-- en los que, en su opinión, "se consiguieron avances para mejorar la situación de muchas personas en todo el mundo que sufrían el incumplimiento de los Derechos Humanos".

A pesar de ello, aclaró que las declaraciones "representan una promesa incumplida" ante "la persistencia de la desigualdad, la impunidad y la injusticia en muchas regiones", por lo que realizó un "llamamiento a que la sociedad y los gobiernos renueven su compromiso con el cumplimiento de la Declaración Universal".

LOS GRANDES RETOS

Entre los grandes retos de Amnistía Internacional actualmente, Itziar Ruiz-Giménez destacó en primer lugar "impedir que la población se vea envuelta en medio de un conflicto armado", y ejemplificó los casos de Gaza, el Congo, Irak o Colombia como "focos de graves violaciones" en esta materia.

Sobre esto, lamentó "la muerte de más de 1.300 personas" y exigió que "se garantice la llegada de ayuda humanitaria" para "apoyar" a una población "que lleva años sin asistencia por culpa del bloqueo ejercido por el Estado de Israel. Además, reclamó que este país "deberá rendir cuentas" por "sus atrocidades" como la utilización de fósforo blanco, que se considera "crimen de guerra".

Un segundo reto supone "dar un paso más contra la violencia machista" ante "una media de 70 mujeres asesinadas al año por esta razón", que "sobre todo afecta a inmigrantes".

Finalmente, demandó "medidas rápidas" contra el "impacto" de la recesión económica en al mayoría población y "especialmente en colectivos vulnerables", ya que ocho de cada 10 personas en el mundo viven todavía bajo el umbral de la pobreza".

SOCIEDAD E INSTITUCIONES

La presidenta de Amnistía Internacional destacó la "importancia de que las personas renueven su compromiso con la lucha por los Derechos Humanos" y que, en el caso de su organización, "se necesita el apoyo civil" para "sacar adelante" sus políticas --no reciben subvenciones de los gobiernos--.

Respecto al "incumplimiento" por parte de las administraciones de destinar el 0,7 del presupuesto a cooperación internacional, valoró que "el Estado mejoró su apoyo en este sentido", aunque denunció "que subordine su política exterior a intereses socioeconómicos" como "la venta de armas a Israel".