SANTIAGO DE COMPOSTELA 15 May. (EUROPA PRESS) -
Más de un millar de personas se concentraron hoy ante las casas consistoriales de las siete ciudades gallegas para expresar su condena y su respulsa ante el último atentado de ETA, perpretado en la madrugada de ayer y en el que falleció un miembro de la Guardia Civil.
En respuesta a la convocatoria de la Federación Española de Municipios (FEMP), autoridades, compañeros de la Benemérita y personas de a pie guardaron varios minutos de silencio, roto finalmanete con aplausos en las siete urbes. Así, manifestaron su rechazo a la violencia terrorista y mostraron su apoyo y solidariedad con las víctimas y sus familias.
En Santiago se desplazaron hasta la Praza do Obradoiro unas 350 personas, entre las que se encontraban representantes de la corporación local, con su alcalde, Xosé Antonio Sánchez Bugallo, al frente. También acudieron a la convocatoria varios miembros de la Xunta, como el conselleiro de Presidencia, José Luis Méndez Romeu; el de Traballo, Ricardo Varela; la de Sanidade, María José Rubio; la de Pesca, Carmen Gallego, la de Política Territorial, María José Caride o la secreatria xeral da Igualdade, Carme Adán.
Asimismo, estaban presentes varios diputados autonómicos, entre ellos el portavoz del PSdeG, Ismael Rego; o los 'populares' José Manuel Castelao Bragaña y Ángel Bernardo Tahoces, además de miembros de la Guardia Civil, la Policía Local y la Nacional. Decenas de turistas, que ese momento paseaban por la plaza, se sumaron al silencio.
UNIDAD DE TODA LA SOCIEDAD.
Al acabar, Sánchez Bugallo realizó en declaraciones a los medios un llamamiento a la unidad de toda la sociedad para derrotar a la banda armada. "Tiene que percibir que no sólo tiene en frente al aparato del Estado, sino al conjunto de la sociedad", enfatizó.
También estuvo presente el secretario general del PPdeG, Alfonso Rueda, que apeló a "demostrar todas las veces que haga falta" la "firmeza" y la "voluntad de todos" para acabar con el terrorismo.
La estampa se repitió en el resto de ciudades del país, como en A Coruña, donde más de 200 personas acudieron a la convocatoria, con su regidor, Javier Losada, y el presidente del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, al frente. Losada leyó un manifiesto en que se expresa el deseo de lograr "una España en paz".
"Son peores los que los alientan, son una banda de sicarios, pero les vamos a ganar porque somos más fuertes, porque somos más y porque tenemos la ley que aplicaremos con todas las garantías", proclamó. Además, reivindicó la presencia en las plazas para prtestar contra el atentado aunque "los violentos piensen que no sirve de nada".
FUERZA DEMOCRÁTICA.
En Ferrol el alcalde, acompañado por unas 300 personas, expresó su condenada ante "otro injustificable, despreciable y aborrecible" asesinato, y llamó a apeló a utilitar "toda la fuerza democrática" para protestar contra "el crimen organizado".
Por su parte, en Vigo se concentraron en torno a 80 personas en la Praza do Rey, ante la Casa Consistorial, para guardar cinco minutos de silencio en memoria del guardia civil Juan Manuel Piñuel y para expresar "el rechazo a la violencia terrorista".
A esta concentración asistieron el alcalde de Vigo, Abel Caballero, y representantes de todos los grupos municipales de la corporación; así como el presidente de la Autoridad Portuaria, Jesús Paz; representantes sindicales y miembros de colectivos vecinales.
En Ourense secundaron la convocatoria unas 300 personas en la Plaza Mayor, en donde los aplausos pusieron fin a los cinco minutos de silencio. Acudieron miembros de todos los grupos de la Corporación local, encabezados por el alcalde, Francisco Rodríguez, así como agentes de la Guardia Civil, Policía Local y bomberos; además del presidente de la Diputación Provincial, José Luis Baltar, y el subdelegado del Gobierno, Camilo Ocampo.
Tras los cinco minutos de silencio, el regidor municipal ourensano destacó que "no existen palabras para difundir lo que sienten los demócratas". "Sobran palabras y faltan que los que hasta ahora asesinaron, reflexionen en que la solución de los problemas está en la palabra y no en pistolas", aseveró, al tiempo que concluyó que las fuerzas políticas están "más unidas que nunca" para luchar por la paz y contra el terror.
AL FIN JUNTOS.
En Lugo un centenar de personas participaron en la concentración silenciosa que celebró debajo de los soportales del Ayuntamiento debido a la lluvia. Entre otros, asistió el alcalde, Xosé Clemente López Orozco; el subdelegado del Gobierno, Jesús Otero; así como integrantes de la corporación local, y altos cargos de la Guardia Civil y Policía Nacional.
Tras los aplausos que pusieron fin a cinco minutos de silencio, el alcalde de Lugo destacó que se ha recuperado la "ansiada unidad" de los demócratas contra los terroristas.
Pontevedra fue la única ciudad que no tuvo la plaza del ayuntamiento como escenario de la concentración, por las obras que se están realizando allí. Por ello, la protesta se trasladó a la Subdelegación del Gobierno, ante la que se juntaron unas 200 personas, que guardaron cinco minutos de silencio.
Estuvieron presentes el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores; junto al subdelegado gubernamental, Delfín Fernández, el presidente de la Diputación, Rafael Louzán; o la dirigente del PP Ana Pastor.