El Ayuntamiento coruñés de Cambre reclama "medidas" al de Culleredo para "evitar malos olores" de la aceitera Bunge

El alcalde de Culleredo pidió a la empresa que "sofoque" la combustión de grano de soja de un silo, que se vaciará y derribará

Europa Press Galicia
Actualizado: sábado, 15 agosto 2009 19:46

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Cambre, en A Coruña, reclamó al gobierno local de Culleredo que "adopte medidas urgentes" con el fin de "evitar malos olores" que asegura que proceden de la factoría Bunge Ibérica.

Fuentes municipales indicaron hoy que "en los últimos días" el mal olor llegó "incluso" a la parroquia de Santa María de Cambre y a Sigrás. Ante esta situación, los responsables del consistorio se pusieron en contacto con los de Culleredo para urgirles solucionar el problema y conocer, de forma oficial, las decisiones ya tomadas.

En este sentido, el alcalde de Culleredo, Julio Sacristán, comunicó al teniente de alcalde de Cambre, Xabier Iglesias, que el pasado 28 de julio la concejalía de Medio Ambiente "requirió a la empresa que adoptase las medidas necesarias para sofocar la combustión de las más de 3.000 toneladas de grano de soja almacenadas en el silo".

También le señaló que la aceitera informó su "intención" de vaciar y derribar la estructura, trabajos que se iniciarán cuando Bunge envíe al ayuntamiento la documentación necesaria, que deberá incluir forma y plazos de demolición.

Aunque Bunge está radicada en suelo perteneciente al municipio de Culleredo, la proximidad de las instalaciones a Cambre provoca que los núcleos de población "más afectados" por el humo sean los de A Barcala y O Temple, recalcó el Ayuntamiento.

Además, según aseguró hoy en un comunicado de prensa, durante los últimos días numerosos vecinos le trasladaron su "malestar" a la corporación por los "continuos malos olores" que denuncian que deben soportar.

Por último, destacó que, aunque la estructura entró en combustión el pasado 6 de mayo, ciudadanos aseguran que los olores "vienen de mucho tiempo atrás". Iglesias concluyó, a este respecto, que "el problema empeoró con las altas temperaturas de los últimos días" e hizo hincapié en que "el olor llegó a ser insoportable".

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