Bugallo teme que la "falta de decisión" de la Xunta provoque la "espantada" de compañías al aeropuerto de Oporto

Actualizado: viernes, 28 agosto 2009 16:45

Advierte del efecto "demoledor" sobre el turismo gallego y asegura que mantiene "contactos" con la consellería, aunque es "escéptico"

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, manifestó hoy su "preocupación" porque la "falta de decisiones" de la Xunta en la negociación con las compañías aéreas sobre su actividad en el Año Santo provoque la "espantada" de algunas de ellas --en concreto, de las de bajo coste-- al aeropuerto de Oporto, en Portugal.

"Se está transmitiendo una imagen de caos perfecto", denunció, al tiempo que alertó que, si finalmente las empresas 'low cost' deciden dejar de volar desde Lavacolla y trasladan la totalidad de sus líneas internacionales a la terminal lusa, el efecto puede ser "muy duro" sobre el turismo en Santiago, pero "puede llegar a ser demoledor para el norte de Galicia".

En rueda de prensa, el primer edil centró sus reclamaciones al Ejecutivo gallego en "que lo que se haga, se haga a partir de lo que hay", ya que tachó de "insensato" que se pretenda "reducir o dividir" los acuerdos "vigentes" desde 2005 hasta 2008. "No vayamos a repartir la mitad de lo que hay entre tres", añadió.

Así, se refirió a las otras ciudades de la comunidad con aeropuerto --A Coruña y Vigo--, para asegurar que "el puerto de Santiago y la Citröen de Santiago es el turismo". Por ello, reprochó que cuando se trata de la capital gallega "parece que hay que repartirlo todo en trocitos".

NEGOCIACIÓN CON LAS COMPAÑÍAS

"Respetamos todo lo que se haga --en ambas localidades--, pero no a costa de socavar al resto. No se trata de repartir la miseria, sino de alcanzar nuestros objetivos", proclamó Bugallo, tras lo que aludió a la "responsabilidad" de la Xunta en un tema que entendió que se encuentra "en serio riesgo".

En esta dirección, vio un "tema secundario" que el Gobierno gallego "lleve directamente" la negociación con las compañías --Ryanair, Air Berlín y Vueling--, pero reiteró su advertencia de que si no se vuelve a la "interlocución" y a los acuerdos mantenidos hasta ahora "se llegará a un resultado desde el punto de vista aeroportuario: Galicia, capital Oporto".

Así, llamó la atención sobre la repercusión turística de esta situación, que podría ser "demoledora" para Galicia en un año como el que viene, en el que celebra el Xacobeo. Como media, según sus datos, cada turista que llega a la capital gallega con una de estas líneas internacionales pasa cinco días en la región, de los que dos los emplea en visitar Santiago.

"Si va a Oporto, estará también dos días allí, y luego podrá visitar Santiago, pero lo que está claro es que Lugo no va a sacar nada", dedujo. Debido a ello y a modo de conclusión, apuntó que "los experimentos, con gaseosa".

Con todo, el Ayuntamiento de Santiago y la Consellería de Cultura e Turismo mantienen "contactos y relaciones", indicó el alcalde de la ciudad, preguntado por los periodistas, aunque terminó expresando su "escepticismo total y absoluto" en la consecución de una solución para una problemática "que viene de lejos".