SANTIAGO DE COMPOSTELA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, aseguró hoy que la reforma del Estatuto de Autonomía es para él una "aspiración irrenunciable" y, por eso, se mostró "plenamente" confiado en que el pueblo gallego "relanzará" la revisión del marco vigente desde 1981 a través del resultado de las elecciones autonómicas del próximo año.
En su intervención durante el arranque del Debate sobre el Estado de la Autonomía, Touriño subrayó que es necesario "un Estatuto de primera", que no esté "ni un milímetro por debajo" del resto de comunidades autónomas. Frente a ello, censuró la actitud "cerrada e inmovilista" del Partido Popular durante las fallidas negociaciones para la reforma estatutaria, a lo que atribuyó que Galicia "no pudo avanzar en su autogobierno".
Después de que el vicepresidente de la Xunta y portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, reclamase el pasado fin de semana durante la Asamblea Extraordinaria del Bloque a las fuerzas políticas gallegas que se posicionen antes de que los ciudadanos voten sobre si defenderán un nuevo Estatuto para Galicia, Touriño volvió a apostar por un nuevo marco estatutario que, "respetando los límites constitucionales", otorgue a Galicia "el máximo nivel competencial" y "el máximo reconocimiento identitario".
LENGUA
El jefe del Ejecutivo gallego llamó a la oposición a retomar el consenso en materia lingüística, uno de los puntos que precisamente supuso más dificultades en la revisión del actual Estatuto. "Dejen fuera de los líos partidarios nuestra mayor creación como pueblo", reclamó dirigiéndose a las bancadas de la oposición, tras parafrasear al intelectual Ramón Piñeiro y reivindicar la lengua como "la que da conciencia de identidad y de unidad".
El titular de la Xunta recordó que durante el debate de política general del año pasado ya ofreció al PP recuperar la unidad en esta materia y lamentó que "no fue posible". En su opinión, esto no se debió a la "falta de voluntad" del Gobierno bipartito, sino al comportamiento de la oposición, que "rompió" el consenso al rechazar el Decreto sobre el gallego en la enseñanza "por motivos nunca aclarados".
En la misma línea, acusó al PPdeG de convertirse en "portavoz de grupos minoritarios que importan falsas polémicas ajenas a la realidad del país", por lo que instó a la oposición a trabajar "juntos" en la creación de una Galicia "plurilingüe, diversa y tolerante".
DIÁLOGO "EXIGENTE Y LEAL" CON EL ESTADO
Respecto a la relación de la Xunta con el Estado, Touriño la definió como "exigente y leal" y, como ejemplo de ello, destacó las transferencias conseguidas a lo largo de la legislatura, como la financiación adicional de 60 millones de euros para saldar "el déficit histórico" en servicios sociales, el Hospital Naval de Ferrol o el Parque Nacional das Illas Atlánticas.
En la misma línea, resaltó que el Gobierno central destinase a Galicia en los últimos años "un caudal de recursos como nunca en la historia", algo que contrapuso con el anterior Gobierno popular, cuando la inversión estatal en la comunidad se situaba "25 puntos por debajo de la media nacional".
También reivindicó haber iniciado "otro trato" en la cooperación con las administraciones locales, como las que abrió un "diálogo permanente". Como ejemplo, se refirió al Pacto Local rubricado con la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) que, según sus cálculos, supuso un incremento de un 42 por ciento en la participación de los ayuntamientos en los ingresos de la comunidad autónoma.
Por otro lado, se refirió de forma breve a la Ciudad de la Cultura, que se propuso convertirla en proyecto "estratégico" con el objetivo de situar a Galicia "en los grandes circuitos internacionales de la cultura". Así, reivindicó la "redefinición" del proyecto del Gaiás llevada a cabo por el bipartito.