VIGO, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Afectados por las preferentes que se presentaron en el Pazo de Mos donde habitualmente se celebran los plenos de esta localidad pontevedresa y la Guardia Civil que había acudido al lugar entablaron forcejeos y empujones tras la celebración de la sesión, la cual abandonaron la alcaldesa, Nidia Arévalo (PP) y otros ediles en sendos coches de la Policía Local.
El pleno celebrado duró unos 10 minutos y en él estuvieron presentes dos de los afectados, pues el resto no entró al requerir la Policía Local el DNI, aunque el BNG se levantó y se marchó en desacuerdo con que el grupo de afectados no estuvieran en el salón.
Una vez se levantó la sesión, la alcaldesa, los concejales del PP y los del PSOE abandonaron el pazo por otra puerta. La regidora se marchó rápidamente en un coche policial y otros ediles se subieron en un segundo. Este último fue rodeado por los afectados por las preferentes, que impedían que se moviera. Así, finalmente se acercaron los efectivos de la Guardia Civil que estaban en el Pazo y, en ese momento, se produjeron empujones y forcejeos entre ambas partes.
