SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
La asociación Galicia Bilingüe animó hoy a que los gallegos adquieran y utilicen los libros de texto "en el idioma oficial que prefieran" y aclaró que, además de en gallego, su uso "en castellano es perfectamente legal" en las aulas.
Concretamente, en un comunicado, la entidad presidida por Gloria Lago estimó en "centenares de personas" las que se dirigen a la asociación "realizar alguna consulta al respecto", y que a finales del curso pasado constató "la existencia de ejemplares en gallego y castellano para la mayoría de materias" y la "disponibilidad" manifiesta de las editoriales para publicar los libros en español "también para conocimiento del medio e historia".
Además, consideró que existen "ciertas lagunas que habilitan a los alumnos para poder elegir" el idioma en el caso de que el centro educativo "pusiera alguna pega".
"Si el colegio se remite al controvertido decreto del gallego 124/2007, concretamente al artículo 13, se podrá esgrimir falta de cobertura legal, además de la propia cláusula de excepción que incluye este mismo artículo, respecto de la obligación de usar siempre el gallego en las documentos y comunicaciones internas de los centros", explicó.
En este sentido, aseguró que "no cabe sanción alguna ni a padres ni a alumnos" ya que el centro "tendría que encuadrar la conducta del escolar en algún tipo sancionable"
Finalmente, recordó que, el pasado mes de octubre, "alrededor de dos mil padres y madres presentaron coordinadamente solicitudes en las oficinas de la Inspección Educativa de cinco ciudades gallegas para que se permitiera expresamente a sus hijos elegir el idioma de estudio". Asimismo, afirmó que "a día de hoy son ya muchos los progenitores o estudiantes que han optado por ejercer ese derecho y adquirir los libros en castellano".
"DESOBEDIENCIA DE LA LEY"
Por su parte, la asociación A Mesa pola Normalización Lingüística criticó "con dureza" la "incívica y crispante llamada a la desobediencia de la legalidad" de Galicia Bilingüe, al "animar a no comprar en gallego" los libros de las materias que la legislación establece que se debe impartir en ese idioma.
"Fue Alberto Núñez Feijóo quien encendió este fuego, apoyando las movilizaciones del odio contra el gallego, y es quien debe apagarlo, poniéndole ahora coto desde la Xunta, que tiene la obligación estatutaria de defender el idioma propio, los derechos civiles y la legalidad", señaló.
Finalmente, recordó que "finalizar la enseñanza sabiendo gallego igual que castellano es un derecho básico que no se le puede robar al alumnado", para destacar que "todas las normas aprobadas en democracia" especifican que las materias impartidas en gallego requieren la utilización de "libros de texto en esa lengua".