PONTEVEDRA, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, pidió "el fin del terrorismo" en la ofrenda que realizó a la Virgen Peregrina en nombre de los ayuntamientos de la provincia, de la que es patrona.
En su intervención, Louzán se refirió al terrorismo como "una de las principales amenazas para la convivencia en paz de todas las gentes de España y el mundo".
El arzobispo de Santiago, Julián Barrio, presidió la ceremonia religiosa, a la que acudieron, además de Louzán, los vicepresidentes de la Diputación de Pontevedra, Corina Porro, Teresa Pedrosa, José María Figueroa y José Juan Durán, así como varios diputados provinciales del PP.
El único dirigente socialista presente en la celebración fue el alcalde de Moraña, José Eiras, ante la ausencia de representantes del BNG y del PSOE, tanto del organismo provincial como del Gobierno local de Pontevedra. Junto a los dirigentes populares también se encontraban los concejales del PP en el Ayuntamiento de Pontevedra, encabezados por Telmo Martín.
En su discurso, Louzán apeló a la Virgen Peregrina para "evitar que la violencia se apropie de identidades políticas o culturales o que se erija en la voz de religiones y creencias que nada deberían tener que ver con el odio". En este sentido, instó a la sociedad a "avanzar desde la conciencia de la solidaridad y el progreso para todos sin privilegios".
Por otra parte, Rafael Louzán pidió la protección de la patrona de la provincia para "los grupos sociales más débiles y vulnerables", entre los que citó las personas mayores, la infancia, los discapacitados, los enfermos, los inmigrantes y las víctimas de la violencia, "especialmente las mujeres maltratadas", añadió.
También se refirió a la necesidad de "mejorar la integración y la igualdad de oportunidades para todos", en alusión a los jóvenes, ante las "dificultades para acceder a un puesto de trabajo con garantías o una vivienda digna".
Por último, tuvo palabras para el colectivo de emigrantes gallegos y descendientes de gallegos en el exterior, así como los trabajadores, entre los que destacó "los que cuidan la salud de los demás a veces con desesperantes listas de espera".
