26M.M.- Euforia en el PSOE con la victoria en Santiago de Bugallo, que apela a que "vuelva" a ser "referencia mundial"
Álvaro Ballesteros - Europa Press
Actualizado: lunes, 27 mayo 2019 14:20

El PP cede la hegemonía en la ciudad de Ourense al PSdeG, pero DO tiene la llave de gobierno, mientras la Diputación Provincial está en el aire

   SANTIAGO DE COMPOSTELA, 27 (EUROPA PRESS)

   Las mareas que hace cuatro años habían irrumpido con fuerza en la escena urbana gallega han cedido en estas elecciones municipales las alcaldías de A Coruña, Santiago de Compostela y Ferrol, que podrían ser gobernadas por el PSOE gracias a pactos postelectorales, así como la ciudad de Lugo, aunque allí los socialistas no fueron la fuerza más votada.

   Además, lastradas por su propia fragmentación interna, la representación de las candidaturas rupturistas desaparece de las corporaciones de Lugo, Ourense y Pontevedra, mientras que en Vigo pierden un concejal y se quedan solo con dos.

   El PP fue la lista más votada en A Coruña, aunque por muy estrecho margen respecto a los socialistas; así como en Lugo y en Ferrol, aunque en ambas ciudades no les servirá a los de Alberto Núñez Feijóo para sentarse en la alcaldía, frente a los pactos postelectorales y apoyos que podrían fraguar los socialistas.

   Una situación más abierta se presenta en Ourense, donde el PSdeG es la lista más votada, con 9 concejales, pero Democracia Ourensana, empatado a 7 ediles con el PP, tiene la llave de gobierno. Si los de Gonzalo Pérez Jácome se decantan por el PP, esta podría ser la única alcaldía urbana que retuviesen los populares.

   Además, el gobierno de la Diputación de Ourense, feudo histórico de los Baltar, primero con su padre y después con su hijo, está en el aire, pendiente de un escrutinio que a nivel provincial se ha quedado estancado en el 98,14%. Así, según la web de resultados electorales del Ministerio del Interior, el recuento de votos está pendiente de que se cierre en la capital de provincia, donde figura al 99,14%, y por ejemplo en Xinzo de Limia, donde figura anclado a estas alturas en el 61,57%.

   En rueda de prensa, José Manuel Baltar ha reconocido que con los resultados actuales aún pendientes de confirmar con el estrunio definitivo, el PP se quedaría con 12 puestos, a uno de la mayoría absoluta en la Diputación ourensana, por nueve del PSdeG, dos de Democracia Ourensana, uno de Ciudadanos y uno del BNG. No obstante, Baltar no descartó seguir gobernando, bien en minoría o bien a través de la búsqueda de apoyos.

   Los resultados en la Diputación de Ourense son más trascendentales que nunca para el PP, porque se trata de la única Diputación que aún controlaban después de las municipales de 2015. Los de José Manuel Baltar podrían buscar pactos con otras fuerzas como Democracia Ourensana, aunque Jácome en campaña había dicho que exigiría apartar al actual presidente provincial, o Ciudadanos, cuyo secretario de organización, Laureano Bermejo, ya ha dicho este lunes que no pondrán "líneas rojas, como otros partidos", sino que van a "escuchar".

PP LISTA MÁS VOTADA EN EL CONJUNTO

   Con las elecciones autonómicas de 2020 en el horizonte y con el futuro de Feijóo sin despejar si optará a un cuarto mandato, en el conjunto de la Comunidad gallega el PP ha recuperado la condición de lista más votada que había perdido ante los socialistas el pasado 28 de abril por primera vez en casi 40 años.

   Con el escrutinio en el conjunto de Galicia estancado en el 99,74% de los votos, los populares le han sacado a los socialistas más de 8.800 votos de ventaja y han obtenido 131 mayorías absolutas y 48 relativas. No obstante, se han dejado más de 26.400 apoyos respecto a hace cuatro años, cuando los de Feijóo habían sido los más votados en 204 de 314 municipios de entonces, pero a su vez habían caído 10 puntos respecto a un exitoso 2011.

CONSOLIDACIÓN DE PSOE Y BNG

   Enfrente, los socialistas logran introducir 104.000 papeletas más del puño y la rosa respecto a 2015, que le reportan 66 mayorías absolutas y 25 relativas, con el 99,74% de los votos escrutados, mientras que hace cuatro años habían logrado 48 absolutas y 30 relativas.

   Por su parte, del BNG llegaron a las urnas 14.000 papeletas más que hace cuatro años. Después de los amargos resultados del 28 de abril, cuando el Bloque consiguió duplicar el porcentaje de apoyos pero no logró volver al Congreso, el 26 de mayo confirmó que el partido sigue en recuperación al conseguir representación en todas las urbes.

   Por su parte, Ciudadanos solo obtiene representación nueva en A Coruña y en Ourense, donde debutan con uno y dos ediles, respectivamente, mientras que la mantienen en Pontevedra y en Lugo, pero desaparece de la corporación de Ferrol. En global, el partido de Albert Rivera ha logrado 33 concejales, mientras que hace cuatro años había obtenido 16 ediles.

   Vox se confirma como una fuerza residual que no ha obtenido representación en ninguno de los 13 ayuntamientos en los que se presentaba, incluidas las siete urbes.

POR CIUDADES

   En Santiago de Compostela, ocho años después de perder la alcaldía, el socialista Xosé Sánchez Bugallo tiene al alcance de la mano el bastón de mando al subir de cuatro a 10 ediles y convertirse en la lista más votada.

   Por su parte, Compostela Aberta, del alcalde saliente, Martiño Noriega, queda relegada a tercera fuerza, con cinco concejales, por detrás de los ocho del PP capitaneados por Agustín Hernández, otro exalcalde. El BNG retiene sus dos ediles.

   En A Coruña, el PP recupera la condición de lista más votada, pero empatado a nueve concejales con los socialistas, que para evitar un gobierno de derechas podría recibir el respaldo de lo seis ediles de Marea Atlántica y de los dos del BNG para hacer alcaldesa a Inés Rey. Ciudadanos logra entrar en María Pita, pero con un solo edil.

   En Ferrol, la condición del PP como lista más votada es amarga para los del exalcalde José Manuel Rey Varela, porque se quedan a solo un concejal de la mayoría absoluta, pero sin socios potenciales que faciliten su vuelta a la alcaldía, porque Ciudadanos pierde el único concejal que habían conseguido en el anterior mandato.

   En esta ciudad, el exsenador socialista Ángel Mato ya ha recibido el respaldo público tanto del candidato de Ferrol en Común, que en el mandato que expira ocupó la alcaldía, pero ahora bajó a tercera fuerza con tres actas, como del BNG, que repite con dos actas.

   Una tesitura similar se presenta en Lugo, donde el PP también fue la lista más votada, con 10 ediles, que no son suficientes sumados a los dos obtenidos por Ciudadanos.

   Así, la socialista Lara Méndez, con 8 concejales, podría revalidar la condición de alcaldesa con pactos, ya que el BNG logró cinco puestos. Eso sí, su investidura podría complicarse si los nacionalistas supeditan el apoyo al PSOE a la dimisión de la alcaldesa, imputada como ya ocurrió con Xosé Clemente López Orozco.

   En Ourense los socialistas también logran alzarse como lista más votada, con nueve ediles, pero la configuración de la corporación resulta más complicada porque los otros puestos se reparten a razón de siete el PP, otros siete Democracia Ourensana, dos en el debut de Ciudadanos y dos con la vuelta del BNG a este consistorio.

   La consolidación de la mayoría absoluta de Abel Caballero, que llega a su cuarto mandato, le ha reportado tres concejales más, hasta llegar a los 20, frente a los cuatro del PP, que baja tres; los dos de Marea de Vigo, que pierde uno; y el concejal del BNG, que también retorna a este consistorio.

   Finalmente, en Pontevedra, donde Miguel Anxo Fernández Lores lleva dos décadas como alcalde, cumplirá un sexto mandato en esta ciudad, aunque otra vez sin mayoría absoluta, puesto que perdió un concejal y se quedó con 11. El PP subió dos y alcanzó los 9, el PSdeG se apuntó uno más, hasta los 4, y Ciudadanos consolida su puesto en el consistorio del Lérez.

Más noticias