La defensa solicitó la suspensión de las penas, aceptada por Fiscalía con la condición de no cometer otro delito
A CORUÑA, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una mujer acusada de atropellar a su expareja en Monfero (A Coruña) y a otra persona ha aceptado dos años de prisión, en el juicio fijado para este jueves en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña. No obstante, Fiscalía aceptó la suspensión de las penas, planteada por la defensa, con la condición de que no cometa otro delito en dos años.
Lo ha hecho tras un acuerdo entre el Ministerio Público, la defensa y la acusación particular al reconocer los hechos la procesada y acordarse una rebaja de la pena que la mujer aceptó tras suprimirse la agravante de parentesco e incluir la atenuante de reparación del daño causado por haber abonado la acusada a cada una de las víctimas 5.000 euros.
Así, el Ministerio Público ha considerado los hechos constitutivos de dos delitos de lesiones con instrumento peligroso y ha pedido un año de prisión por cada uno de ellos y ha suprimido "toda petición de responsabilidad civil".
Asimismo, las partes han acordado la prohibición de comunicarse "por cualquier medio" con las víctimas y de aproximarse a ellos a menos de 500 metros por un plazo de cinco años años.
La abogada de la defensa solicitó, además, la suspensión de las penas de cárcel y la fiscal aceptó la petición. En consecuencia, la juez acordó la suspensión firme de las condenas de prisión con la condición de no cometer delitos en un plazo de dos años y manteniendo las prohibiciones de comunicación y aproximación a las víctimas.
HECHOS
En su escrito de calificación, el Ministerio Público sostiene que la acusada mantuvo hasta julio de 2018 una breve relación sentimental con un hombre con quien, tras la ruptura, tuvo graves conflictos de los que derivaron dos sentencias condenatorias.
Ya en octubre de ese año, sobre las 22,00 horas del día 19, en el término municipal de Monfero (A Coruña) la mujer trató de entablar una conversación con su expareja, rechazando él todo contacto con ella.
Cuando se disponía a abandonar el lugar, y a los mandos del coche de su propiedad, al verlo hablando con otras personas y "guiada por el ánimo de acabar con la vida de este y sin importarle, en lo más mínimo, lo que sucediera a quienes lo acompañaban en ese momento, intencionadamente", dirigió el coche contra el hombre, arrollando, además, a otra persona.
