La ola de calor abrasa Galicia y los termómetros alcanzan los 43 grados en Valdeorras

La Playa de Panxón (Pontevedra) llena de personas durante la ola de calor.
La Playa de Panxón (Pontevedra) llena de personas durante la ola de calor. - AGOSTIME
Publicado: martes, 22 agosto 2023 20:02

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -

La ola de calor que desde el lunes afecta a Galicia ha elevado este martes los termómetros por encima de los 40 grados en distintos puntos de la comunidad, especialmente en la provincia de Ourense, donde se ha registrado la máxima de la jornada, en Vilamartín de Valdeorras, con 42,9 grados centígrados.

Esta localidad valdeorresa ha sido, por segunda jornada consecutiva, la más cálida de la comunidad, aunque el martes el mercurio subió 4 grados más que la temperatura más alta del lunes. A las 17,00 horas, la estación de Meteogalicia registraba 42,9 grados en esta zona, que estaba en alerta roja por calor.

Las otras cuatro temperaturas más elevadas de Galicia este martes también han sido en la provincia de Ourense, la más afectada por la alerta de calor.

En concreto, se ha llegado a los 41,9 grados en Larouco, a los 41,8 grados en la ciudad de Ourense, a 41,7 grados en Leiro y a 41 en la unidad medidora de la estación de Ourense.

En el sur de Lugo también se ha subido de los 40 grados en localidades como Pantón y Ribas de Sil, con 40,4, y Monforte, donde se han marcado los 40,3 grados.

En la provincia de Pontevedra, la temperatura más alta ha sido la de Arbo, donde los termómetros han llegado a los 39 grados; mientras que en A Coruña la más elevada han sido los 37,9 grados registrados tanto en Lousame como en Boqueixón.

En el otro lado de la balanza, las temperaturas en la costa han sido más suaves y las máximas más bajas han estado en la Mariña Lucense, con los 18,8 grados de Viveiro o los 19,1 de Burela.

OURENSE, EPICENTRO DEL CALOR

Ourense acostumbra a ser uno de los epicentros de las altas temperaturas en Galicia y, aunque los meses de junio y julio fueron suaves, agosto ha entrado de lleno con calor y una cuarta ola que estos días vive sus puntos álgidos en esta provincia.

Lo cierto es que las alertas decretadas --roja en Valdeorras y naranja en el Miño-- se han hecho notar en los termómetros a lo largo de esta jornada que, junto con la del miércoles, son aquellas en las que se esperan las temperaturas más altas.

Además de las altas temperaturas de Valdeorras, en la capital ourensana el calor tampoco pasó desapercibido, aunque fue más en sensación térmica que en los termómetros. Mientras Meteogalicia registraba 41,5 grados, los termómetros de las calles no superaban los 40, aunque la sensación térmica es mucho mayor debido a la orografía del terreno.

Precisamente hace ya un año y también en temporada estival, el regidor ourensano, Gonzalo Pérez Jácome, anunciaba que solicitaría a la "Xunta de Galicia, al Estado español y a Europa todas las vías de financiación posibles" para duplicar el número de árboles del ayuntamiento. Entonces eran 10.000 en todo el término municipal, 4.000 en las calles y 6.000 en las zonas verdes.

La cifra no ha cambiado y es que ya entonces el alcalde advertía de que sería una medida que daría "frutos seguramente en siete u ocho años". "No mitigará la próxima ola de calor del 2023, pero sí ayudará a las del 2030 o a las del 2032", decía entonces.

Su intención era incrementar la zona verde y perder plazas de aparcamiento porque cada dos o tres plazas "habrá que dejar un hueco para un árbol", un ejemplar que pretendía que fuese "frondoso, con un tronco curioso y un follaje importante para que absorba la radiación y proyecte sombra y refresco".

Por el momento, y a falta de más árboles, los ourensanos han acudido a sus grandes aliados: ríos y piscinas. Oira, la playa fluvial de Antela y las piscinas de Monterrei han sido las zonas elegidas en la capital, así como los parques infantiles con juegos acuáticos. Mientras que, como ya es costumbre en estas épocas del año, el embalse de Castrelo de Miño y las pozas de Melón han sido escenarios de los chapuzones lejos de As Burgas.