Pleno.- Los grupos inician el curso con llamadas a la unidad pero Xunta y oposición se reprochan su actitud ante la crisis

Actualizado: martes, 9 septiembre 2008 17:14

Feijóo recrimina a Touriño que no esté "centrado" en la desaceleración y éste lo acusa de "pescar en época de veda"

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los grupos políticos arrancaron hoy el curso político en el Parlamento gallego con llamadas mutuas al "diálogo" y a la "unidad" para hacer frente a la actual situación de crisis aunque Xunta y oposición se reprocharon mutuamente sus respectivas actitudes antes las dificultades económicas.

Durante su comparecencia para hablar de la situación económica, el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, acusó hoy al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, de aprovechar la actual situación económica para "pescar en época de veda" y el presidente de los 'populares' gallegos le recriminó que "no esté centrado y concentrado" en la crisis.

Así, Feijóo enfatizó a lo largo de su discurso la "división" del bipartito y, como ejemplo, puso los enfrentamientos de los socios de la Xunta por el Plan Acuícola o por la fecha electoral. Respecto a este último punto, consideró que Touriño abrió "otra crisis" al barajar durante el verano la posibilidad de adelantar las autonómicas. "Cuando había que liderar el país quiso salir por la puerta de atrás", le recriminó, tras subrayar que los nacionalistas calificaron esta actitud del presidente de la Xunta como "irresponsable".

Así, consideró que Touriño quiso "dar la espantada" al ver "el toro de la crisis". "Pero entre todos le cerramos la puerta de la crisis", continuó Feijóo y, con el mismo símil taurino, concluyó que el presidente gallego está "enfurruñado" y "deseando que termine la legislatura" para que "no lo coja el toro de la crisis".

GOBIERNO DEL CAMBIO

"Es un adelantado, siempre tuvo visión", replicó en tono irónico el jefe del Ejecutivo autonómico y, en la misma línea, añadió que Feijóo es "un fenómeno" por haber pronosticado un adelanto electoral que finalmente no se produjo. De este modo, le recriminó su "política partidista" en momentos de crisis, lo que prueba que el PPdeG "no tiene alternativa".

El presidente gallego, que estuvo arropado por todos los conselleiros excepto los de Industria y Vivenda -ambos del BNG--, contrarrestó las acusaciones de la oposición asegurando que el bipartito está "unido, fuerte y cohesionado".

En general, los socios de la Xunta colocaron frente a la "herencia" del PP los "tres años de crecimiento y de cambio" que supuso el bipartito y que, en palabras de Touriño, no tiene "precedentes" en la historia reciente. Así, coincidieron en lanzar reproches al modelo económico del anterior Gobierno popular, que Touriño tildó de "anémico", y en considerar sus acusaciones al actual como "insolventes".

No obstante, socialistas y nacionalistas pusieron énfasis en sus respectivas áreas de gobierno. De este modo, mientras el presidente de la Xunta resaltó la política laboral o de ordenación del territorio --dirigida por consellerías del PSdeG--, Aymerich destacó la política industrial, de servicios sociales o de vivienda -áreas gestionadas por el BNG--.

"ESFUERZO COMPARTIDO"

Las tres fuerzas políticas coincidieron en su intención de llegar a acuerdos aunque sus llamadas a la unidad no se materializaron en ningún pacto concreto. Así, Feijóo propuso a la Xunta cinco acuerdos en materias como la financiación autonómica, la crisis o la necesidad de ejercer el autogobierno para paliar las dificultades, aunque Touriño desacreditó estas ofertas al enmarcarlas en su "fiebre asiática de pactos".

En cualquier caso, el presidente gallego también apeló al "trabajo común" y al "esfuerzo compartido" de las fuerzas políticas gallegas y censuró "cualquier tentación de trasladar el fardo al conjunto de la sociedad". Así, aseguró en el turno de cierre de su comparecencia que "siempre" invitó al líder de la oposición a mantener "un diálogo franco" sobre "cualquier tema".

Aunque lamentó su "respuesta negativa" en asuntos como la reforma del Estatuto, la cuestión lingüística o el pacto del territorio, animó a Feijóo a "remar juntos" en lo que queda de legislatura para paliar las consecuencias de la desaceleración.

También el portavoz del Bloque en el Parlamento, Carlos Aymerich, reclamó una "postura de país" ante la actual situación y, entre otros temas, reivindicó esa unidad para la financiación autonómica, las infraestructuras, o la construcción naval civil. "Es ahora cuando esas posiciones de país se tienen que llevar a cabo", retó.