SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los grupos parlamentarios del PSdeG y del BNG avanzaron hoy que transaccionarán al menos nueve de las 789 enmiendas presentadas por el PPdeG a los presupuestos de la Xunta para 2008, lo que supondrá una modificación de 2,8 millones de euros de los más de 11.500 presupuestados. Ante estos datos, la oposición les acusó de "pasar el rodillo" y de respaldar unas cuentas "traslúcidas".
Así se manifestó en la primera jornada del debate definitivo sobre el proyecto de ley, que acabará mañana con la votación final sobre el texto, en la que se deberán confirmar los cambios acordados. Además, faltan por abordar las enmiendas a las consellerías de Medio Ambiente, Traballo y Vivenda e Solo, por lo que aún resta margen para aceptar otras iniciativas, si bien socialistas y nacionalistas ya adelantaron que aceptarían sólo ocho, que finalmente se convirtieron en nueve. El año pasado, la cuantía de partidas movidas alcanzó los 12 millones.
Así, el departamento de Medio Rural acapara la mayor parte de las enmiendas transaccionadas, ocho, por un valor de 2,4 millones de euros. De hecho, fue el único momento en el que se produjo cierto consenso entre los portavoces, por lo que el 'popular' Roberto Castro agredeció la actitud de la nacionalista Tereixa Paz y la socialista Marisol Soneira.
Más de un tercio del total modificado, 1,1 millones, se destinarán a financiar un plan de promoción de las cinco Denominaciones de Origen del vino gallego y 100.000 a la patata de Xinzo; 500.000 euros se dedicarán a infraestructuras en las zonas vitivinícolas --cuando el PP se refería sólo a la comarca da Ribeira Sacra--; y otros 500.000 euros se aportarán para impulsar la ganadería extensiva, al cambiar una propuesta que limitaba el respaldo al sector productor de conejo.
RODILLO.
La otra enmienda tenida en cuenta se encuadra en las cuentas de la Consellería de Innovación e Industria y en ella se recoge una inversión de 400.000 euros para la puesta en marcha de la Axencia Galega de Desenvolvemento Industrial, "un viejo compromiso" de PSdeG y BNG, según el diputado del PP Ángel Bernando Tahoces.
No obstante, la tónica del debate estuvo marcada por el rechazo de los grupos que sustentan al bipartito a las propuestas de la oposición, que se quejó del "rodillo" que, a su juicio, han aplicado. En total, se presentaron 824 enmiendas, 789 de los populares y 35 conjuntas de socialistas y nacionalistas, que se ya debatieron en comisión, de modo que se reducen en más de 15 por ciento con respecto al año pasado.
En la intervención inicial, el portavoz popular de Economía, Alberto Sueiro, argumentó que el Ejecutivo ha caído "en la endogamia y en la soberbia". "Esperábamos que tomesen en consideración más --propuestas-- y se enriqueciese el texto legal, pero es un deseo inútil", se quejó. En esta cuestión incidió irónicamente Roberto Castro, que comenzó expresando su esperanza en que le concediesen "alguna propina solbiana" con sus enmiendas, en relación a los comentarios del ministro de Economía, Pedro Solbes.
LOCALISMO EN LAS ENMIENDAS.
En esta línea, Sueiro los acusó de creer "que están en posesión de la verdad" y recordó que en 2004 el PP aceptó cinco enmiendas, lo que provocó las críticas de los grupos que de aquella estaban en la oposición. Además, tachó las cuentas de "traslúcidas" y criticó que "se amparen en la eficacia y en la flexibilidad para manejar la ley a su antojo".
Sin embargo, socialistas y nacionalistas rechazaron estas críticas y sus representanes utilizaron en numerosas ocasiones dos argumentos: los errores técnicos en algunas enmiendas y el localismo de otras. De este modo, rechazaron la creación de un fondo de compensación para rebajar los peajes por razones políticas --echaron en cara al PP su "cinismo"-- y también porque, a su juicio, no estaba bien formulada.
Asimismo, el nacionalista Fernando Blanco Parga se refirió a una propuesta de electrificar una zona de Viveiro que actualmente está deshabitada. Su compañera Carme da Silva aludió a otra para ampliar el malecón de Monforte, donde se construye un puerto seco pero que está a 90 kilóemtros de la costa y a 300 metros del nivel de mar.
POLÍTICA FISCAL.
Antes, el portavoz del Bloque, Carlos Aymerich, defendió el articulado del texto y reprochó a la oposición que "persiga imponer restricciones que no existían antes" a la hora de ejecutar los presupuestos. También interpretó la enmienda para aumentar el fondo de pensiones no contributivas de 5 a 19 millones como un intento de "reducir la retribución de los empleados de la Administración".
Además, se opuso a introducir en esta parte del texto cambios para modificar la política fiscal del Gobierno, tal y como defendían varias enmiendas. Es más, recordó que el BNG no es partidario de eliminar impuestos, como el de sucesiones o el de patrimonio, "por razones de justicia social".
En esta misma línea se expresó el socialista Xaquín Fernández Leiceaga, que destacó el "rigor" del texto, que, a su juicio, introduce novedades como la regulación de las agencias y generará "estabilidad y confianza". Asimismo, opinó que algunas de las enmiendas del PP suponen una "impugnación" a la política practicada por el Gobierno de Manuel Fraga.
AUSENCIAS.
Por otro lado, la presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, no no dirigió la sesión de la tarde, a pesar de que se había incorporado alrededor de las 13.00 horas, tras permanecer ingresada en el Hospital Xeral Cíes de Vigo el día y la noche de ayer a causa de un proceso vírico que no revestía gravedad.
Villarino, ausente en la primera y en la última parte del debate, fue recibida calurosamente por los diputados que hicieron uso de la palabra desde su aparición, como el socialista Xaquín Fernández Leiceaga y el 'popular' Alberto Sueiro. Una vez suspendida la sesión por la mañana, parlamentarios de las tres fuerzas políticas se acercaron para saludarla e interesarse por su estado.
Por su parte, el diputado del PPdeG Xosé Cuíña tampoco pudo acudir hoy al Pazo do Hórreo, ya que se encuentra ingresado desde hace dos días por una neumonía de la que evoluciona favorablemente. En las filas ¡populares¡ también faltaron su presidente, Alberto Núñez Feijóo, y los diputados José Manuel Castelao Bragaña y Aurelio Miras Portugal.
Los tres volvieron este mediodía de su viaje por Argentina, en el que acompañaron al líder del partido, Mariano Rajoy, si bien finalmente no pudieron incorporarse a la sesión, a la que sí acudirán mañana.