El proyecto USC 'En transición' busca reducir la pegada ecológica y la dependencia energética "a medio o largo plazo"

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Universidade de Santiago de Compostela pretende "reducir la pegada y deuda ecológica" junto con la dependencia energética a través del nuevo proyecto USC 'En transición', una iniciativa "pionera" enmarcada en el Plan de Desarrollo Sustentable (PDS) y que pretende obtener resultados "a medio o largo plazo".

El proyecto tiene su origen en el movimiento 'comunidades en transición', iniciado en Kinsale (Irlanda), con el fin de dotar a estos territorios para afrontar el doble desafío del cambio climático y de las limitaciones en el acceso a los recursos energéticos.

De este modo, la institución pretende extender este concepto entre sus estudiantes para implantarlo en las ciudades en las que está instalada (Santiago y Lugo), para así transformarse en "auténticas comunidades en transición" y con "sus propias alternativas".

La USC emprenderá, en concreto, tres actividades a lo largo del periodo académico 2010-2011. El trabajo se iniciará con 33 becas para dar a conocer el concepto de sociedad en transición al conjunto de la comunidad universitaria, a través de acciones de educación ambiental.

La segunda iniciativa será un proyecto de gestión de residuos que se implantará en el Colegio Mayor Fonseca y la Residencia Universitaria Monte da Condesa, con el objeto de reducir los despojos en el entorno de estos inmuebles.

Finalmente, se organizará un curso de formación destinada a profesores y coordinadores PDS sobre las comunidades en transición y profundizar en este tipo de sociedades, junto con alguna de las experiencias existentes.

Estas actuaciones serán evaluadas al término del curso académico, como referente temporal para comprobar los resultados, si bien la institución aclara que espera avanzar en sus objetivos "a medio o largo plazo".

REALIZAR "UN ESFUERZO"

Durante el acto de presentación del proyecto, en rueda de prensa, el rector de la USC, Juan Casares Long, ha destacado la "necesidad" de emprender "un esfuerzo" de cara a la "sostenibilidad" de la institución académica. Un "proceso de mejora" que debe ir "más allá" del ámbito medioambiental, abarcando el uso racional de recursos y un cambio en los hábitos y costumbres.

En esta línea, la vicerrectora de Responsabilidade Social e Calidade, Benita Silva, ha considerado que se trata de un proyecto "anclado en la realidad" de un sistema "frágil", que requiere una modificación de los hábitos de consumo energético al tiempo que se continúa la búsqueda de alternativas en las fuentes de energía.

"Las renovables no nos van a dar suficiente para el consumo actual", ha advertido, para reiterar su "importancia" por una cuestión de "salud, bienestar y calidad de vida".