El alcalde replica que ejerce presión "permanentemente" y recuerda que los afectados pasaron de veinte a cuatro
VIGO, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de unos diez vecinos de Teis que pertenecen a la comisión de afectados por la construcción del AVE intentaron boicotear durante una hora y media un acto del alcalde de Vigo, Abel Caballero, a quien reclaman que actúe de mediador ante el Ministerio de Fomento, con el fin de conseguir "precios de mercado" en las expropiaciones de terrenos.
Los vecinos interrumpieron una rueda de prensa que el alcalde celebraba en una sala contigua, con silbatos y bocinazos, reclamando "precios justos" por sus casas y terrenos, y demandaron a Caballero que cumpla su compromiso electoral de interceder ante Fomento para que los afectados fueran compensados suficientemente por la venta de sus fincas.
El portavoz de la comisión de afectados, Manuel Antonio Sotelino, afirmó que los vecinos afectados por estas expropiaciones, con los que aún no se ha llegado a un acuerdo, son los propietarios de cuatro casas y de entre 50 y 60 fincas, y lamentó que la oferta de Fomento por esos terrenos (6,75 euros por metro cuadrado) "es imposible de aceptar".
Los vecinos atribuyen estas ofertas a una maniobra de "venganza" de la Administración, en respuesta a las movilizaciones de los afectados y exigieron al alcalde de Vigo "que dé la cara por los afectados, tal y como se comprometió en la campaña electoral". "Las ofertas iniciales eran ridículas, pero ahora son de venganza", criticó Sotelino.
En ese sentido, la comisión reclama "precios de mercado" y aseguran que, por ejemplo, "no se puede pagar 25 millones por una casa de 200 metros cuadrados, más otros 600 metros de terreno". "Hace 33 años, Autopistas ya nos pagaba el doble", afirmó Manuel Antonio Sotelino, quien insistió en que "Fomento hace lo que le da la gana, y el alcalde lo permite".
"EJERCER PRESIÓN".
Por su parte, el alcalde, Abel Caballero, aseguró que está "permanentemente mediando y ejerciendo presión" ante la Delegación del Gobierno y el Ministerio de Fomento, y aseveró que "ningún ciudadano de Vigo va a quedar desamparados" mientras él sea alcalde.
El regidor, quien manifestó su "simpatía y cercanía" hacia los afectados, recordó que al principio del mandato se reunió con ellos, unos 20 y que "ahora son cuatro, por lo que algo se avanzó". Caballero afirmó que seguirá "ejerciendo presión" ante el Ministerio y auguró que el conflicto "se va a resolver", al tiempo que insistió en que conoce "perfectamente" el problema.
Los vecinos abandonaron las dependencias municipales alrededor del mediodía, sin que el alcalde les hubiera recibido, aunque anunciaron que preparan más movilizaciones para los próximos días.
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