PONTEVEDRA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los 20 barcos congeladores gallegos que faenaban en aguas de Mauritania --y que suspendieron su campaña en ese caladero el pasado 31 de diciembre-- ya se encuentran en el puerto de Las Palmas, donde entre hoy y mañana van a concluir la descarga de las 2.600 toneladas de cefalópodos -principalmente pulpo- que transportaban en sus bodegas.
El presidente de la Asociación Nacional de Cefalopoderos (Anacef), Francisco Freire, justificó la decisión del sector de no renovar la licencia para el primer trimestre de 2008 porque a los armadores les resulta "absolutamente imposible" rentabilizar el caladero. De los 39 buques que tenían autorización para faenar en Mauritania, 19 de ellos ya adelantaron su marcha debido a que "no podían seguir".
En declaraciones a Europa Press, Francisco Freire calificó las condiciones técnicas vigentes por las que se tienen que regir -plasmadas en el convenio firmado en 2006- de unas "pseudomedidas ficticias" amparadas en la necesidad de proteger los recursos.
"Los primeros interesados en que el recurso se proteja somos nosotros", insistió el presidente de Anacef, quien lamentó que hay existencias, si bien con las normas actuales "los recursos que hay no se pueden pescar". A estas dificultades, Freire sumó también el encarecimiento del precio del combustible.
En este sentido, y mientras que los barcos permanecen amarrados a puerto en situación de "stand by, esperando acontecimientos", el presidente de Anacef anunció que esta misma semana iniciarán contactos con diferentes grupos políticos para explicar la situación y exigir "que se actualicen y se adecuen las medidas técnicas" a las necesidades del sector.
BNG.
Uno de los partidos que se ha interesado por este problema es el BNG, que solicitó información a Anacef sobre las condiciones en las que se desarrolló esta última campaña. El portavoz de Pesca del Bloque, Bieito Lobeira, presentará mañana diversas iniciativas "en defensa de la flota gallega" que faena en Mauritania.
Por su parte, el responsable de pesca de la CIG, Xabier Aboi, adelantó también que a partir de la próxima semana convocará a los marineros afectados por el amarre de los barcos.
De los aproximadamente 350 marineros que faenan en estos 20 buques, unos 150 son de origen gallego, según los cálculos de Aboi, que se mostró preocupado por la repercusión de este paro en los ingresos de los trabajadores.