Pesca.- La flota gallega permanece amarrada por los fuertes vientos y olas de hasta cinco metros de altura

SANTIAGO DE COMPOSTELA 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

La flota gallega de bajura permanece hoy amarrada en puerto por los fuertes vientos y mar de fondo del noroeste que provoca en todo el litoral de la comunidad olas que alcanzan los cinco metros de altura y visibilidad mala para poder faenar.

Así lo confirmaron a Europa Press diferentes cofradías y lonjas gallegas, quienes confirmaron el "muy mal tiempo" registrado durante toda la madrugada y primera hora de la mañana en todo el litoral de la comunidad que mantiene en tierra a la flota de A Coruña, Pontevedra y Lugo. En este último caso, las embarcaciones de bajura se atrevieron a salir pero se vieron obligadas a volver a puerto y no prevén salir ya mañana, "porque las predicciones son que empeora", anunciaron armadores de Burela.

De este modo, el viento de suroeste con vientos de más de 70 kilómetros por hora con fuerte marejada en la Costa da Morte ha provocado que no salgan a faenar cofradías como las de Camariñas, Cariño, Cedeira y Malpica. El sector alertó del día "muy malo" con "todas las condiciones meteorológicas adversas: lluvia, viento y mucho mar". Precisamente, en este litoral, el mar es de fondo de noroeste con olas de 4 a 5 metros.

La misma decisión ha tomado el sector de Pontevedra, en el que la flota de bajura de Baiona, Bueu, Cangas y O Grove están amarradas a puerto al encontrarse desde esta madrugada con vientos del suroeste e fuerza 6 a 7 (entre 39 a 61 kilómetros por hora); con fuerte marejada y visibilidad mala, con olas que alcanza los cinco metros.

Condiciones meteorológicas similares se han encontrado esta jornada la flota que faena en la costa lucense. No obstante, las pequeñas embarcaciones decidieron salir a faenar. Sin embargo, se encontraron con ola de hasta cinco metros, mar de fondo, fuerte marejada y visibilidad mala que les obligó volver a puerto, donde seguramente quedarán también mañana, ante unas predicciones "aún más malas", advirtió un armador de Burela.