SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
El último de los cinco supervivientes del naufragio del 'Rosamar', Luis Oliveira, abandonó Viveiro tras prestar declaración ante la magistrada del Juzgado de Primera Instancia de esta localidad lucense para dirigirse a su casa de Aveiro (Portugal), según aseguró a Europa Press su armador, Jesús Labayén.
"¡Por fin podrá descansar!", afirmó en declaraciones a Europa Press después de confirmar que el relato de los hechos que se produjeron en el momento del hundimiento del arrastrero de litoral a 24 millas al norte de Burela se prolongó "más tiempo del previsto". Finalmente, Oliveira salió de Viveiro sobre las 17.30 con destino a Aveiro, villa marinera lusa en la que reside.
Por su parte, el armador señaló que, pese al naufragio del 'Rosamar', debe reanudar su labor en la empresa 'Pescarías Labayén', cuyos otros tres buques no dejaron de trabajar estos días.
Jesús Labayén destacó la "enorme pérdida" que supuso el hundimiento de uno de los arrastreros de litoral de su familia al subrayar que, además de los perjuicios personales y la merma de la rentabilidad económica para la empresa, le tenía "cariño" al barco. Asimismo apuntó que, aunque el 'Rosamar' estaba asegurado, la posibilidad de adquirir un nuevo arrastrero "es muy complicada".
En este sentido recordó que tras adquirir el buque en Portugal, un arrastrero de litoral de 25 años de antigüedad, hace cinco años que se sometió a la embarcación "a una reforma muy grande".
MALAS CONDICIONES EN EL MAR
Las malas condiciones registradas hoy en la zona donde operaba el operativo de rescate que buscaba a los cinco desaparecidos del 'Rosamar' obligaron a los dos buques que se encontraban realizando esas labores a volver a puerto a última hora de la mañana, según confirmaron a Europa Press fuentes de Salvamento Marítimo del Ministerio de Fomento.
Las olas de hasta seis metros y de frecuencia muy corta llevaron a interrumpir los trabajos de busca que efectuaban el remolcador 'María de Maeztu' y el buque polivalente 'Irmáns García Nodal', así como la embarcación salvamar 'Shaula'. No obstante, el avión 'Rosalía de Castro' continuó su labor que no abandonó hasta el anochecer.
Los trabajos de la aeronave fueron complementados por diversos equipos de Protección Civil que rastrearon en tierra la zona comprendida entre Estaca de Bares y Burela. Fuentes de Salvamento Marítimo aseguraron que la previsión meteorológica de mañana apunta un empeoramiento de las condiciones del mar en esta área.