El Ayuntamiento de Eivissa adeudaba al finalizar 2008 un total de 6,1 millones de euros a proveedores

Europa Press Islas Baleares
Actualizado: martes, 30 junio 2009 21:29

IBIZA 30 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Eivissa cerró el ejercicio 2008 con obligaciones pendientes de pago por valor de 5.878.661,65 euros , sin contabilizar las deudas de los tres patronatos municipales, según criticaron hoy desde el Grupo Popular. Entre los 469 acreedores del Consistorio ibicenco, figuran empresas de comunicación, agencias de viajes, constructoras y la propia alcaldesa de Vila, Lurdes Costa, quien reclama al municipio una deuda de 41,32 euros, mientras percibe un salario de las arcas públicas de al menos 60.000 euros brutos anuales, concretaron desde la oposición.

La liquidación del Presupuesto del Ayuntamiento correspondiente al año 2008 revela que la deuda media por proveedor se situó a 31 de diciembre pasado en 12.534,45 euros. A estas cantidades, habría que sumar, además, las obligaciones pendientes de pago que acumula patronatos municipales como el de Música, valorado en un montante de 99.315,59 euros, el de Deportes, en 101.634,27 euros y, finalmente, el del Museo de Arte Contemporáneo, con 31.619,95 euros.

En total, la liquidación contabiliza deudas por valor de 6.111.231,46 euros en facturas pendiente de pago a proveedores, según matizó el edil del PP, Jaime Díaz de Entresotos.

Entre los principales acreedores municipales figura la concesionaria del servicio de limpieza, CESPA, con una deuda pendiente de cobro de casi 1,2 millones de euros, 'Carburantes Ibiza, S.L.', con 703.754,72 euros, la sociedad 'Balear de Datos y Procesos', responsable de la implantación de la Administración telemática, que tiene pendiente de cobrar 300.776,39 euros o la empresa responsable de la gestión integral del Agua -Aqualia-, con facturas presentadas por valor de 86.871,42 euros.

Las facturas presentadas por cinco agencias de viajes y que continuaban pendientes de pago a 31 de diciembre suman un total de 40.858,78 euros. El Consistorio adeudaba en esa misma fecha 11.504 euros a asociaciones de vecinos y asociaciones culturales, 5.319,6 euros a los dos sindicatos mayoritarios (UGT y CC.OO.), 7.500 euros a la Fundación Deixalles y 4.232,13 euros a la Fundación Edex, encargada de la ejecución de programas de intervención socioeducativa con menores en situación de dificultad social y en la atención a las drogodependencias.

Según de Entresotos, resulta "especialmente significativa" la deuda de 81.526,90 euros que el Ayuntamiento de Eivissa consigna en la liquidación del presupuesto del 2008 con el Institut de Treball Social i Servei Social, una asociación sin fines lucrativos y de ámbito estatal que trabaja en el sector del bienestar social.

Cruz Roja Española tenía pendiente de cobro 2.500 euros y la Asociación de Donantes de Sangre, 2.500 euros más. En la misma relación de acreedores se incluye también una deuda de 19.590,35 euros en uniformes municipales y 4.810,42 euros en recibos pendientes de pago a una conocida pastelería de la ciudad.

DEUDAS CON EL PSOE-EXC

La alcaldesa también figura como acreedora del Ayuntamiento de Eivissa, tal y como sentenció el concejal 'popular'. Según la liquidación del presupuesto, el municipio debe abonar a Lurdes Costa dos recibos, uno por importe de 26,67 euros y otro de 14,65 euros. La misma relación de acreedores incluye al tercer teniente de alcalde que, con un salario de 55.000 euros brutos anuales, y quien, según lamentó de Entresotos, "no está dispuesto a perdonar al municipio un recibo de 15,05 euros".

El representante de Izquierda Unida y concejal de Medio Ambiente, Joan Rubio, por su parte, reclama siete recibos por un importe total de 255,49 euros. Su sueldo anual bruto con cargo a las arcas municipales es de 45.000 euros, matizaron desde el PP.

El Ayuntamiento, por su parte, tiene 15,5 millones de euros de deudas pendientes de cobro, que no se han podido recaudar. Sin embargo, los 'populares' explicaron que esa cantidad se está utilizando para "cuadrar unos números que en realidad no cuadran" y señalaron que "deberían suprimirse las deudas que realmente va a ser imposible cobrar, para que la contabilidad reflejara la situación real".

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