PALMA DE MALLORCA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
La diputada del PP, Mabel Cabrer, insistió hoy en acusar al Govern de alargar "al máximo" el cierre del metro de Palma, a su juicio, "por intereses políticos" ya que, según aseguró, el problema de drenaje en el Polígono de Son Castelló "se sabía desde el principio".
Así lo manifestó hoy en declaraciones a los medios de comunicación tras la reunión que mantuvo con el conseller de Movilidad y Ordenación del Territorio, Biel Vicens, y donde aseguró que las obras de reparación del metro podrían haber comenzado "hace mucho tiempo", acusando al Ejecutivo Autonómico de no tener "ganas de trabajar".
"Han pasado más de tres meses, los primeros problemas se detectaron en agosto y siempre se ha sabido cual era el problema de drenaje en el Polígono de Son Castelló", recalcó Cabrer, quien manifestó que, a pesar de que los partidos que ahora gobiernan estuvieran en desacuerdo con el metro, "esto no debe impedir que tengan visión para decir que el metro es un buen servicio de transporte". "Lo que pediría es que se recupere el tiempo perdido y que se trabaje noches y fines de semana, ya que el polígono lo permite" señaló.
En relación a las informaciones publicadas que indicaban que las obras del metro ya habían costado alrededor de diez millones de euros, la diputada retó al Govern a que muestre los números y calificó la suma de "chiste".
"No ha habido movimiento, sabemos que no son ni diez ni cinco millones. Lo más transparente es que saquen lo que han gastado hasta ahora" manifestó Cabrer.
EXPLICACIONES DEL PP
Por su parte, el conseller de Movilidad y Ordenación del Territorio, Biel Vicens, subrayó que "hace tiempo" que el PP tendría que haber explicado cómo se hizo el metro "y porqué se cambiaron muchas cosas" ya que, en su opinión, esas explicaciones "hubieran ido muy bien a Serveis Ferroviaris de Mallorca" para saber qué problemas tenía el suburbano y cuales eran los proyectos modificados.
"Siempre diré que el PP tendría que haber demostrado un talante de colaboración y no uno de decir que el metro no se inunda y que son cuatro goteras" sostuvo Vicens, quien instó al partido de la oposición a corregir su actitud.
A juicio del conseller, los ciudadanos "se merecen una explicación" y apuntó que el Govern se ha visto en la obligación de hacer auditorías "que cuestan dinero" y que, según sostuvo, se podrían haber evitado con la colaboración del PP.
Respecto a las sumas de dinero en las que se cifra el coste de las obras hasta el momento, Vicens subrayó que la Conselleria no ha dado cifras oficiales, por lo que no quiso valorar las aparecidas en algunos medios de comunicación, al tiempo que manifestó que cuando la obra de reparación del metro haya concluido se darán a conocer las cifras de coste para la Conselleria y para las empresas constructoras.
Sobre la posibilidad de que el suburbano pueda ser reabierto coincidiendo con las Elecciones Generales del próximo mes de marzo, Vicens aseguró que las obras estarán acabadas "cuando puedan estar acabadas, haya o no haya elecciones", recordando que, según los técnicos que elaboraron la auditoría, el metro no podrá funcionar antes del mes de abril.