Las cuatro toneladas de hachís intervenidas en enero en la Bahía de Alcúdia son incineradas en Son Reus

PALMA DE MALLORCA, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

Las cuatro toneladas de hachís que fueron intervenidas por la Guardia Civil en una operación que tuvo lugar en un chalet de lujo ubicado en la Bahía de Alcúdia el pasado mes de enero, y que supuso la detención de diez presuntos narcotraficantes, fueron incineradas a primera hora de hoy en la planta de Son Reus.

Al acto de destrucción de los estupefacientes decomisados acudió el delegado del Gobierno en las Illes Balears, Ramón Socias, así como el coronel jefe de la Benemérita, Basilio Sánchez Rufo, y la consellera de Medio Ambiente y Residuos; que mostraron el inicio del proceso de incineración entre fuertes medidas de seguridad.

Por su parte, Socias resaltó que la Guardia Civil lucha contra el narcotráfico con "efectividad y eficacia", como se viene demostrando con intensidad desde el año pasado, pero especialmente en los últimos días, con la intervención de dos alijos distintos, uno de tres toneladas en Valldemossa el viernes, y otro de 1,2 toneladas en Mallorca, así como 2,1 toneladas más en Granollers.

Sobre estas últimas operaciones, comentó que "hemos destruido o deshecho dos organizaciones muy importantes y, por lo tanto muy activas", que "intentaban introducir mucha cantidad de droga" y, como finalmente fue decomisada, se ha vuelto a batir el récord de cantidades de sustancias estupefacientes incineradas en las islas, con más de diez toneladas en lo que va de 2008.

Además, el delegado del Gobierno también consideró que se está luchando con la misma efectividad contra el menudeo de drogas, especialmente, desde que hace tres años se puso en marcha un plan de vigilancia de colegios que este curso se amplió a las zonas de ocio de los escolares, y que permitió intervenir unos 16 kilos de drogas, en su mayoría hachís.

A este respecto, Socias se mostró favorable a mantener la vigilancia, porque los narcotraficantes "buscan alternativas" para introducir la droga en las islas, como la Costa Norte de Mallorca, que aunque más inaccesible, "también es de más difícil control" por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, admitió.