Las empleadas del SAD colapsan el registro del ayuntamiento para reclamar un aumento salarial

Actualizado: martes, 23 septiembre 2008 16:38

Piden un aumento salarial para poder equiparar su sueldo al de las empleadas que dependen directamente del Consistorio

PALMA DE MALLORCA, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un centenar de trabajadoras del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD), en huelga indefinida desde el pasado mes de agosto, dieron entrada hoy en el registro del Ayuntamiento de un escrito personalizado y dirigido a la alcaldesa, Aina Calvo, en el que le exigen que interceda para que pueda firmarse el convenio colectivo con las empresas -Intress y Servisar- que equipare su sueldo con el de las empleadas que dependen directamente del Consistorio.

Hacia las 13:30 horas una marea de mujeres llegó al Ayuntamiento de Palma, procedente de la Plaza España, para manifestarse como vienen haciendo cada semana desde el mes pasado con el fin de reivindicar la firma de un convenio colectivo "digno", que contempla un aumento salarial y que está encallado en forma de preacuerdo en el TAMIB. En esta ocasión, las trabajadoras, acompañadas por los representantes sindicales, han optado por presentar en el registro del consistorio un escrito pidiendo a la primera edil que tome parte en este conflicto y ayude a resolverlo.

Las trabajadoras han hecho cola de forma "ordenada y pacífica", explicó en declaraciones a Europa Press el secretario del Sector Salud de FSP-UGT, Miguel Herranz, quien explicó que el texto señala que ni las empresas subcontratadas, ni los representantes municipales "quieren asumir el preacuerdo alcanzado" y añade que "el proceder del ayuntamiento no ha hecho más que impedir el necesario acuerdo".

Por ello, las empleadas piden a Calvo que "dé instrucciones precisas para que se respete el derecho a la negociación colectiva" y solicitan que en los presupuestos del Ayuntamiento de 2009 se dote "adecuadamente "la prestación de los servicios para evitar que la falta de recursos impida un correcto desarrollo de la ley de Dependencia" o, en este contexto, que "una merma de la remuneración de los trabajadores repercuta irremediablemente en un empeoramiento de la prestación de los mismos".

Herranz recordó que la negociación del convenio empezó a truncarse a principios de julio y en estos momentos hay un preacuerdo en el TAMIB que "no tiene la bendición del ayuntamiento", lo que hace que las empresas no confíen en que percibirán la consiguiente dotación económica del Consistorio. "Es un problema a tres bandas que dificulta poder encontrar una salida", remarcó.

Añadió que si las empresas "no tienen garantías de que el Ayuntamiento va a asumir la parte que le corresponde", es "imposible" resolver esta situación. "La administración está poniendo pegas para los aumentos salariales y ello se está notando en el ejercicio del trabajo de las empleadas", explicó.