PALMA DE MALLORCA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Salud y Consumo ha modificado el proyecto del Hospital de Son Espases para eliminar las barreras arquitectónicas y adecuarse así al Código Técnico de la Edificación, normativa de obligado cumplimiento que no estaba prevista en el proyecto adjudicado que comenzó a ejecutarse el primer trimestre de 2007 por el anterior Govern.
Así lo informó hoy el conseller Vicenç Thomàs, en la Comisión no Permanente de Salud del Parlament, quien apuntó que el coste de las modificaciones todavía se está negociando con la empresa concesionaria, ya que el contrato a través del sistema PFI se basa en pagos en cuotas mensuales que se deben volver a determinar a consecuencia de los cambios realizados en el proyecto.
Igualmente, se han introducido cambios importantes en el modelo de negocio que hará la concesionaria, lo que repercutirá de forma "positiva" en el coste que finalmente pagará la Administración, según apuntó la Conselleria en un comunicado.
La adaptación del proyecto para cumplir el Código Técnico de la Edificación ha permitido asegurar que el nuevo centro hospitalario cumple la normativa vigente en materia medioambiental y respeta las mesuras de ahorro energético. Así, se han revisado todas las puertas, ventanas y cierres para ahorrar la máxima energía posible; se han comprobado las paredes y el aislamiento de ruidos; se han revisado las condiciones de salubridad y seguridad; se ha puesto más señalización de emergencia y más sistemas de evacuación de humos, y se ha dotado la fachada de un revestimiento de aluminio para resistir el fuego.
Por otro lado, la eliminación de las barreras arquitectónicas ha obligado a cambiar todos los baños de las habitaciones y de las zonas comunes puesto que no reunían los requisitos mínimos que fija la ley. Igualmente, se han adaptado las rampas y los vestuarios del personal y se han llevado a cabo otras mejoras para paliar el impacto visual y la protección del territorio, al tiempo que se han adoptado medidas para optimizar los espacios asistenciales y de equipamiento sanitario.
Éste es el caso del aumento de cuatro quirófanos, la adaptación para un quirófano inteligente y la posibilidad de disponer de cuatro quirófanos con flujo laminar. Se ha ampliado además en más de 1.000 metros cuadrados el servicio de urgencias con separación del área pediátrica, y se ha conseguido incrementar en 1.200 metros cuadrados el espacio de la UCI cardiológica, toda vez que se ha reservado espacio para las tareas de investigación.
Finalmente, el conseller explicó que se ha dotado el hospital de 480 plazas más de aparcamiento, que serán explotadas por la sociedad concesionaria; se ha conseguido un retorno importante de costes a través del ahorro energético y también existe la posibilidad de disponer de más superficie comercial. Estos tres apartados por si mismos ya financian una parte importante del coste de las modificaciones. El espacio afectado por las reformas de mejora afecta aproximadamente a 60.000 metros cuadrados.
PÍLDORA POSTCOITAL
Otra de las cuestiones tratadas en la Comisión no Permanente de Salud fue la píldora postcoital, respecto a la cual Thomàs ofreció los datos de distribución de los años 2007 (14.151 dosis) y de 2008 (13.292), aunque no hay datos de dispensación porque este medicamento no estaba incluido en el catálogo de fármacos subvencionados por el Sistema Nacional de Salud ni existía ningún registro.
Precisamente, manifestó el titular de Salud, el decreto aprobado por la Conselleria que permite la dispensación gratuita de la píldora del día después en los centros sanitarios públicos obliga a crear un registro de usuarias y, por lo tanto, hacer un seguimiento del número de píldoras recetadas por los profesionales.
HOSPITALIZACIÓN DOMICILIARIA EN SON DURETA
Por otro lado, Thomàs señaló que el hospital de Son Dureta atendió en 2008 a 594 personas en su servicio de hospitalización domiciliaria, considerando "positivas" todas las medidas que eviten días de ingreso en un hospital, puesto que benefician a los pacientes y hacen "más eficiente" el sistema sanitario.
Sin embargo, el conseller señaló que la política de la Conselleria se orienta a que sean los profesionales de Atención Primaria y no de los hospitales los que den este servicio, ya que los médicos de familia y las enfermeras comunitarias cuentan con la ventaja de la proximidad, conocen todo el entorno, situación personal y sociofamiliar del paciente y así pueden abordar su tratamiento de una manera integral.