PALMA DE MALLORCA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Parlament se comprometió hoy a velar por impedir la aparición de vertidos ilegales en las islas y, de esta manera, prevenir un daño en la imagen del archipiélago. En concreto, durante el pasado año hubo un total de 382 denuncias sobre este asunto, mientras que en 2001 hubo 91, detalló el conseller de Medio Ambiente, Miquel Àngel Grimalt.
Todos los grupos de la Cámara autonómica coincidieron en la necesidad de determinar por escrito, mediante la aprobación de una moción o a través de una comisión, las competencias que posee cada institución en cuanto a los vertidos ilegales, así como sobre la posibilidad de proceder a un "abaratamiento de los costes" que suponen tirar los escombros.
El parlamentario del Bloc Miquel Àngel Llauger criticó que las obras del Plan E no estén suponiendo un aumento de los escombros en las plantas de derribo, sino que muchos de los vertidos ilegales proceden de estas actuaciones desarrolladas por los ayuntamientos.
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