PALMA DE MALLORCA, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Unión, Progreso y Democracia (UPyD) considera que la deuda de la comunidad balear es "muy superior" a lo que reconoce al Banco de España (BE), ya que a los 4.742 millones de euros reconocidos hay que sumar lo que el Govern debe en gastos comprometidos a ejercicios futuros y que no se computan aquí porque la CAIB no lo reconoce en su pasivo.
Según ha indicado UPyD en un comunicado, la deuda pública de Baleares alcanzó los 4.064 millones de euros a finales de 2010, a los que hay que sumar los 678 millones de euros de las empresas públicas que no se incluyen en la Administración General de la CAIB. Según el Banco de España, estos 4.742 millones de deuda representan el 17,9% del PIB balear.
El partido ha apuntado, asimismo, que Baleares incumplió en 2010 el objetivo del déficit al registrar un 4,16% de deuda de su PIB, por encima del 2,4% límite, "lo que refleja que el Govern incumple el rigor presupuestario exigido ya que gasta más de lo que ingresa". "Incluso la deuda presupuestada que se incluye en los ingresos no es suficiente para cuadrar las cuentas anuales", ha apostillado.
De ahí que la deuda acumulada, lejos de disminuir, vaya en aumento a medida que transcurren los meses. Una situación que UPyD ha tildado de "funesta" por cuanto constituye "una pesada hipoteca para las generaciones futuras, amén de todos los efectos negativos que acarrea no tener unas cuentas públicas saneadas".
Sin embargo, lo más preocupante para UPyD es la deuda no financiera que no detecta el Banco de España porque la CAIB no la reconoce en su pasivo. Esta "deuda camuflada" corresponde a inversiones que suelen aparecer como gastos comprometidos a ejercicios futuros. Así, ha detallado que podrían computarse como tales las inversiones en las carreteras de Ibiza, el hospital de Son Espases, Can Misses y otros centros de salud.
Con el fin de hacer estas inversiones, el Govern recurre a la constructora que corre con la financiación y el mantenimiento. Después el Ejecutivo, durante treinta (o cuarenta años), va devolviendo el total de la inversión (intereses y mantenimiento incluidos) como una subvención anual o como un gasto de mantenimiento como si fuera un alquiler, ha explicado el partido. En este sentido, ha señalado que solo el IB-Salut debe cerca de 2.000 millones de euros en gastos comprometidos a ejercicios futuros
Asimismo, ha indicado que los consorcios para infraestructuras y servicios sirven como "un instrumento de ingeniería financiera para camuflar deuda". Así, ha afirmado que estos entes son los que nominalmente se endeudan ante al banco para hacer una inversión y son después los participantes en el consorcio (Govern y ayuntamientos) quienes pagan al consorcio el crédito a través de una subvención anual. De esta forma el crédito de la inversión no aparece en los balances de la comunidad.