NUEVA DELHI, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
El activista indio Anna Hazare, que inició este martes una huelga de hambre para protestar contra el proyecto de ley anticorrupción propuesto por el Gobierno y que está debatiendo el Parlamento, ha anunciado que depondrá su iniciativa pero seguirá luchando por que la nueva norma sea más dura.
"Planeaba ayunar durante tres días pero en realidad mi ayuno comenzó hace cuatro días", ha señalado, según recogen los medios locales. "He decidido finalizar el ayuno hoy. Solo hay un camino a seguir y he decidido protestar en los cinco estados en los que habrá elecciones en lugar de continuar mi ayuno", ha explicado. Así las cosas, ha pedido a "todos los ciudadanos de India que piensen en las generaciones futuras y se unan a nuestra campaña en los cinco estados".
La Lok Sabha (Cámara Baja) aprobó el proyecto de ley, conocido como Lokpal, que el activista había tachado de "débil" con diez enmiendas y ahora está previsto que la Rajya Sabha (Cámara Alta) la debata mañana y la apruebe, después de que la presidenta del país, Pratibha Patil, haya dado su visto bueno, dadas las implicaciones financieras que tiene la nueva norma.
Los médicos habían recomendado previamente a Hazare que abandonara su iniciativa debido a su frágil estado de salud. "Estamos preocupados", había señalado uno de los médicos que le han examinado este miércoles, tras constatar signos de deshidratación que podrían llevar a un fallo renal.
En su comparecencia ayer ante sus seguidores, el activista, que se mostró débil, aseguró que está dispuesto a dar su vida por el país y que luchará hasta el final por una ley anticorrupción fuerte. En este sentido, su equipo ha descrito el proyecto de ley aprobado como "inútil" y ha considerado que no tiene sentido dar un carácter constitucional a una ley "débil".
"No estamos en contra de que la Lokpal tenga un estatus constitucional, pero debería ser una ley más potente y no una institución inútil y poco mordaz", ha defendido Prashant Bhushan, uno de los miembros del equipo de Hazare. "El tipo de ley que se ha aprobado es inútil", ha insistido.