GINEBRA (SUIZA), 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los refugiados afganos que regresan a sus casas necesitan el apoyo de la comunidad internacional, ya que no tienen ni trabajo ni tierras, según alertó hoy la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Desde el año 2002, unos cinco millones de refugiados han regresado a Afganistán, principalmente desde Pakistán e Irán. Aún así, unos tres millones continúan en países vecinos después de casi veinte años fuera de sus hogares.
ACNUR consideró que conseguir que estas personas retomen sus vidas es un difícil reto a largo plazo, por lo que pidió un trabajo más intenso por parte de los países donantes.
Tras concluir una visita de tres días a la región, la responsable de operaciones del organismo, Judy Cheng Hopkins, dijo que esta repatriación es "uno de los mayores éxitos en el proceso de recuperación de Afganistán".
En su viaje a la región, Cheng pudo comprobar el deterioro de la seguridad que sufren algunas partes del país y las complicadas condiciones económicas que atraviesan muchas de estas personas.
En este sentido, aseguró que "la responsabilidad es del Gobierno afgano, aunque ACNUR trabajará junto a otras organizaciones para atender las necesidades de la población."
