KABUL, 15 Oct. (EP/AP) -
El Ejército estadounidense informó hoy de que, una vez concluida una investigación, ha determinado que sus militares no profanaron un ejemplar del Corán durante una incursión en una vivienda afgana, tal como aseguran los vecinos de una localidad de la provincia de Kunar, en el este del país, quienes se reunieron con el gobernador y los dirigentes provinciales ayer domingo para denunciar el caso.
El vicegobernador provincial de Kunar, Noor Mohammad Jan, aseguró que los soldados estadounidenses irrumpieron el pasado sábado en la vivienda del mulá Zarbaz, un dirigente religioso, y le detuvieron a él y a otras tres personas.
Los vecinos de la localidad aseguran que los militares rasgaron, acuchillaron y quemaron el libro santo del Islam, lo que provocó una importante manifestación de protesta, explicó Jan. Dos funcionarios afganos han sido designados para investigar los sucesos y un comandante estadounidense, presente en la reunión de ayer domingo, aseguró que el Ejército castigaría cualquier ataque contra el libro, siempre según indicó Jan.
Sin embargo, un portavoz de la coalición liderada por Estados Unidos, el comandante Chris Belcher, responsable de las operaciones de las Fuerzas Especiales, encargadas habitualmente de las operaciones nocturnas, aseguró que las acusaciones ya habían sido investigadas y que los resultados revelan que son infundadas.
"Lo hemos investigado. No hubo profanación del Corán ni de ningún símbolo religioso por parte de las fuerzas estadounidenses. Si un soldado lo hubiera profanado tomaríamos medidas", aseguró Belcher.
Jan explicó que los dirigentes tribales que participaron en la reunión de ayer emplazaron al mando estadounidense presente a que el Ejército norteamericano informe con antelación a las autoridades afganas antes de los registros. Los afganos también pidieron al oficial estadounidense que el Ejército informe a las autoridades afganas de las detenciones que realice.
