KABUL 27 Feb. (EP/AP) -
Las milicias islámicas de los talibán han reivindicado el atentado suicida perpetrado esta mañana en el exterior la principal base estadounidense en Afganistán, Bagram, que causó la muerte de 19 personas, y han asegurado que el objetivo del ataque era el vicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney, quien había pasado la noche en la base y que resultó ileso.
La explosión se produjo hacia las diez de la mañana (seis y media de la madrugada en España) en la puerta principal de la base en Bagram y causó 19 muertos y 11 heridos, según informó el jefe del departamento público de salud de la provincia, Joya Mohamed Qasim Sayedi. La OTAN ha informado inicialmente de tres muertos y 23 heridos y de que entre los fallecidos figuran un soldado estadounidense y otro de la coalición internacional.
El comandante estadounidense William Mitchell, aseguró que el ataque no estuvo relacionado con la visita del vicepresidente, quien se encontraba "a salvo en el interior de la base". "No estaba en el lugar de la explosión", precisó.
Por su parte, la portavoz de Cheney, Lea Anne McBride, declaró que "el vicepresidente se encuentra bien" y la Embajada estadounidense aseguró que el mandatario se entrevistó posteriormente en Kabul --a 50 kilómetros al sur de Bagram-- con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai.