TEHERÁN, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente iraquí, Mahmud Ahmadineyad, aseguró ayer que su país es ya "un Irán nuclear" al dominar, dijo, "el ciclo completo de combustible nuclear" y advirtió a Occidente de que la única manera de tratar con la República Islámica de Irán es a través del diálogo y la amistad, y no las amenazas.
"Hoy, Irán es un Irán nuclear", reiteró el mandatario iraní en rueda de prensa desde Teherán. "Esto significa --dijo--, que posee el ciclo completo de combustible nuclear", aclaró, si bien insistió en que el régimen de los ayatolás está comprometido con la "senda de la paz", la que guía, dijo, su programa atómico.
Las declaraciones se producen después de que el lunes la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) anunciara que Irán se había comprometido a ofrecer dar información a la agencia sobre un proyecto secreto para procesar uranio --que los servicios de Inteligencia estadounidenses relacionan con la fabricación de explosivos muy potentes, acusaciones que Irán califica de "infundadas"--, así como sobre sus diseños de cabezas nucleares.
El compromiso alcanzado incluye un memorando por parte de la delegación iraní acreditada ante la AIEA. En él, el Ejecutivo de Teherán detalla un calendario para suministrar información sensible, requerida por el organismo internacional, acerca del programa atómico iraní.
En el documento, que ha sido publicado por la agencia en su página Web, Irán incide en que la búsqueda de información sobre el denominado "Proyecto Sal Verde" responde a "motivaciones políticas" en base a "acusaciones sin fundamento".
Sin embargo, aclara que "como señal de buena voluntad y cooperación con la agencia, Irán revisará" su documentación sobre el proyecto proporcionado por la agencia "e informará a la agencia de su análisis", reza el memorando.
Estados Unidos advirtió de que la cooperación de Irán con la AIEA no impedirá que el Consejo de Seguridad de la ONU emita una tercera ronda de sanciones contra Irán por no suspender su programa de enriquecimiento de uranio, tal y como exigió la comunidad internacional.
Por este motivo, Ahmadineyad calificó al presidente estadounidense, George W. Bush, sin nombrarle, de líder "malvado, egoísta y arrogante" que ha utilizado al Consejo de Seguridad, del que ha abusado, para impedir que Irán se dote de un programa nuclear.
"Viste que tu coerción fue inútil", insistió Ahmadineyad. "Algunos líderes malvados y egoístas se postraron arrogantemente detrás del podio para decir 'no dejaremos que hagan esto'. Vendiste tu prestigio y te alineaste en contra de una nación cultivada. Le recomiendo que no repita este comportamiento deshonesto", agregó.
IRÁN DISPUESTO A SUPLIR VACÍO DE PODER
Por otra parte, Ahmadineyad advirtió de un inminente vacío de poder en Irak y aseguró que Teherán está dispuesto a suplirlo. "El poder político de los ocupantes se está deteriorando rápidamente", incidió en alusión a las tropas estadounidenses.
"Pronto, veremos un enorme vacío de poder en la región, y por supuesto estamos dispuestos a suplir el hueco con la ayuda de nuestros vecinos y amigos de la región como Arabia Saudí y con la de la nación iraquí", aseguró.
El presidente iraní acusó a Estados Unidos de interferir en los asuntos internos de Irak y censuró las declaraciones de personalidades estadounidenses, entre ellos el propio Bush, sobre la incapacidad del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, para reconciliar a las comunidades del país, chiíes, suníes y kurdos, sin olvidar otra minorías y recriminó a la Administración de Bush no proporcionar respuestas sobre por qué han muerto hasta ahora 600.000 iraquíes desde la invasión estadounidense de Irak en marzo de 2003 "¿Quién va a responder por ello? ¿Qué se consiguió con ello?", indicó.
"Dicen de forma irrespetuosa que el primer ministro (iraquí) y la Constitución deben cambiarse", indicó. "¿Quién sois? ¿Quién os ha dado el derecho?" de exigir tal cambio, se preguntó el mandatario iraní, quien predijo que todos los esfuerzos de Washington para derrumbar al Gobierno de Al Maliki, de confesión chií, fracasarán.
"La ocupación es la raíz de todos los problemas en Irak. (Los estadounidenses) No tienen otra opción que aceptar su derrota y la independencia y los derechos de la nación iraquí", agregó, al tiempo que aseguró que Estados Unidos no lanzará ningún ataque contra Irán al carecer de plan para ello y porque no está en posición de hacerlo.
