TIRANA, 18 Feb. (EP/AP) -
Miles de observadores están ya preparados para supervisar las elecciones municipales albanesas que finalmente se celebrarán hoy a pesar de las dificultades y gracias, en parte, a la mediación española, que ejerce la presidencia de turno de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Unos 3.000 observadores de ocho organizaciones no gubernamentales albanesas garantizarán la limpieza de unas votaciones que han sido planteadas como un hito crucial en la transición del país. A estos voluntarios se les sumarán 323 entre observadores de la Oficina para las Instituciones Democráticos y los Derechos Humanos de la OSCE y del Congreso de Autoridades Locales y Regionales de Consejo de Europa.
Son 2,9 millones de albaneses los llamados a las urnas para elegir a 380 cargos municipales en estos comicios. Los dos partidos principales son la coalición de los Demócratas, formada por diez partidos y liderada por el primer ministro, Sali Berisha; y la coalición opositora, formada por cinco partidos y con el alcalde de Tirana, Edi Rama, al frente.
"Las elecciones serán escrutadas a través de la lente de las aspiraciones albanesas de ingreso en la UE y en la OTAN. Unas elecciones libres y limpias que cumplan con los estándares internacionales serán una señal de que Albania se acerca a estos objetivos", aseguró la embajadora estadounidense en Tirana, Marcie B. Ries.
Está previsto que se den a conocer los primeros resultados oficiales el lunes por la mañana, según informó la Comisión Electoral albanesa.
Miles de personas acudieron el viernes a los actos de cierre de campaña de las coaliciones lideradas por el Partido Democrático y el Partido Socialista en Tirana. Entre las banderas albanesas destacaban en los mítines la presencia de banderas de la Unión Europea y de Estados Unidos.
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, envió a principios de enero al director general de Política Exterior para Europa y América del Norte, José Pons, a Albania para desbloquear la situación después de que la Comisión Electoral se viera obligada a suspender los comicios del 20 de enero por la incapacidad de Ejecutivo y oposición en acordar qué documentos debían presentar los ciudadanos para identificarse a la hora de votar.
Tras una propuesta presentada por Pons, los 12 partidos del arco parlamentario acordaron qué documentos serían precisos para votar y fijaron la fecha de los comicios para el próximo 18 de febrero.
