Alemania/Polonia.- Merkel y Kaczynski prometen que intentarán suavizar sus problemas

Actualizado: lunes, 30 octubre 2006 14:45

BERLÍN, 30 Oct. (de la corresponsal de EUROPA PRESS Rosa Aranda) -

La canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro polaco, Jaroslaw Kaczynski, intentarán mejorar las relaciones bilaterales entre ambos países, desgastadas sobre todo a raíz de los planes de construcción del gasoducto ruso-alemán a través del Mar Báltico, según aseguraron ambos en una reunión mantenida hoy en Berlín.

Kaczynski, que fue recibido en la capital germana con honores militares, pidió a Alemania que utilice su Presidencia de turno de la Unión Europea para potenciar el tema energético en la unión de países.

Ambos políticos discutieron sobre este tema y subrayaron, por otra parte, los nexos históricos entre ambos países y el positivo balance de sus relaciones comerciales.

Merkel, que había anunciado en un comunicado que se alegraba de la primera visita oficial del primer ministro de Polonia porque "queremos un comportamiento amistoso y de cooperación con nuestros vecinos del Este", y añadió que esta visita es "simbólica para el futuro desarrollo de nuestras relaciones" y que "juntos, podemos hacer mucho por Europa".

Las relaciones polacoalemanas sufren una crisis en la actualidad, sobre todo porque el gaseoducto ruso-alemán no pisa suelo polaco, así como por la diferencia de opiniones en cuanto a la expulsión que se produjo de los alemanes que se encontraban en Polonia al finalizar la Segunda Guerra Mundial. También son motivo de disputa los recientes rumores de que la política polaca pretende reducir los derechos de la minoría alemana en Polonia.

Sin embargo, en una entrevista publicada hoy por diario alemán 'Bild Zeitung', el más leído del país, Kaczynski rechaza la idea de que las relaciones entre Alemania y Polonia hayan empeorado desde que él llegó al poder en Polonia y se ha referido solamente a "diferencias de intereses" entre ambos países, que pueden ser aclaradas de forma conjunta.

Con ello quiso hacer referencia a la construcción del gaseoducto del Mar Báltico, operación que el jefe del Gobierno polaco considera que se está utilizando como arma política.

"No queremos llegar a la situación de tener que temer que alguien nos cierre el grifo energético", dijo en una entrevista publicada hoy por el rotativo financiero alemán Handelsblatt. "Ningún país puede aceptar decisiones que contradicen sus intereses", añadió.

En cuanto a las pretensiones de algunos alemanes que vivieron en Polonia antes y durante la Segunda Guerra Mundial y que exigen ahora que les sean devueltas sus propiedades inmobiliarias, Kaczynski pidió a Merkel que ambos lleguen a un acuerdo para que esta posibilidad sea eliminada por completo.

Erika Steinbach, presidenta de la Federación Alemana de Desplazados Forzosos, asociación que reúne a aquellos alemanes que fueron expulsados de los territorios del Este que Alemania perdió tras la guerra, acusó hoy directamente al primer ministro polaco en el diario berlinés Tagesspiegel, de ser el responsable del deterioro de las relaciones germano-polacas.

Steinbach, fuertemente criticada en Polonia, dijo que "de forma constante, Kaczynski ataca verbalmente a Alemania y esto no ayuda a la mejora de las relaciones bilaterales".