BONN, 17 Nov. (DPA/EP) -
Las autoridades alemanas se preparan para organizar un simulacro a gran escala para responder a la escasez de gas que podría traer aparejada un invierno riguroso y con temperaturas de hasta 25 grados centígrados bajo cero.
De 2.500 a 3.000 personas participarán a fines de noviembre en el simulacro que tendrá lugar en varios puntos del país a instancias de la Oficina de Protección Civil y Ayuda en Caso de Catástrofes (BBK, por sus siglas en alemán).
El ensayo tiene por objetivo coordinar la actuación de las autoridades federales, las regionales y las empresas energéticas privadas en caso de emergencia.
Incluso está siendo filmado un programa ficticio del principal noticiero alemán 'Tagesschau' para generar una situación lo más auténtica posible.
"Tuvimos la idea después de la riada del Elba en 2002, en la que vimos que no funcionó bien la cooperación entre las autoridades federales y las regionales", ha explicado a DPA el presidente de la BBK, Christoph Unger.
Este año se simula una emergencia de escasez de gas natural. El ejercicio será realizado principalmente los días 28 y 29 de noviembre. Los participantes permanecerán en sus lugares de trabajo habituales. "Estamos conectados con los ministerios, autoridades y empresas a través de Internet, algo que también sucede en el caso de una catástrofe real", ha explicado Unger.
En el caso de la escasez de gas, las compañías energéticas y finalmente el Estado decidirán qué empresas serán abastecidas y cuáles no. "En algún momento se dará la situación en la que habrá que cortar el suministro a regiones enteras. En este caso se plantea la cuestión de qué hacer con los grandes hospitales y cómo asistir a la población", ha aseverado.
El vicepresidente de la autoridad reguladora de energía de Alemania (Bundesnetzagentur), Peter Franke, sostuvo que el suministro de gas natural en Alemania está asegurado. Sin embargo, es necesario estar bien preparado también para emergencias improbables, ha aclarado.
