NUEVA YORK, 13 Dic. (EP/AP) -
La ONU elevó hoy a once el número de sus empleados muertos y a cinco el de heridos en el atentado perpetrado el pasado martes contra una de las oficinas que tiene Naciones Unidas en la capital argelina. Además, la viceportavoz de la ONU, Marie Okabe, indicó que continúan las labores para "recuperar e identificar los cadáveres".
De esta manera, aumenta el balance de víctimas empleadas en la ONU que fueron identificadas ayer, cuando se dijo que ascendían a nueve. En el ataque, llevado a cabo por Al Qaeda en el Magreb, fallecieron seis argelinos, un senegalés, un danés y un filipino. Es el peor atentado registrado contra las Naciones Unidas desde el que ocurrió en agosto de 2003 en su sede de Bagdad, donde murió el principal enviado de la ONU en Irak, Sergio Vieira de Mello, y otras 21 personas.
Okabe aseguró hoy a los periodistas que el director del Programa de Desarrollo de la ONU, Kemal Dervis, se ha reunido con las familias de las víctimas y ha visitado a los heridos. "Actualmente, se sabe que once empleados de la ONU han muerto y que cinco están aún desaparecidos", añadió.
Dervis destacó, según Okabe, que el trabajo de la ONU continuará a pesar de lo ocurrido y que se trata de una institución políticamente neutral que trabaja para el desarrollo, la paz y las causas humanitarias. También lamentó que las víctimas mortales no eran militares que se hubiesen alistado para la guerra, sino civiles, la mayoría argelinos, que trabajaban para lograr la paz y el desarrollo y aliviar el sufrimiento humano.
