MADRID 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Siria, Bashar Al Assad, ha emitido este martes un decreto por virtud del cual establece una serie de penas para quienes entren en el país árabe de forma ilegal, según ha informado la agencia de noticias oficial, SANA.
De acuerdo con el decreto presidencial, aquellos que entren en territorio sirio de forma ilegal podrán ser condenados a una pena de entre cinco y diez años de cárcel y a una multa de entre cinco y diez millones de libras sirias (38.000 y 76.000 euros).
El régimen de Al Assad ha denunciado en numerosas ocasiones supuestos intentos de infiltración de "terroristas" extranjeros, sobre todo de nacionalidad libanesa y turca, en territorio sirio para desestabilizar el país.
Además, ha denunciado que estos "terroristas" están financiados por potencias regionales, entre las que ha mencionado a Arabia Saudí, Qatar y Turquía, entre otros países extranjeros, instando al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas a actuar al respecto.
La oposición, por su parte, ha denunciado la participación de combatientes de Hezbolá y de "elementos iraníes" en la guerra civil. El líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, ha admitido la presencia del partido-milicia chií libanés en Siria para proteger a la comunidad libanesa y los templos religiosos.
Desde que comenzó el levantamiento popular contra el régimen de Al Assad, en marzo de 2011, Naciones Unidas calcula que unas 93.000 personas han muerto a causa de los combates entre las fuerzas gubernamentales y las rebeldes.