NUEVA YORK, 8 (Reuters/EP)
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha elegido a la ex presidenta chilena Michelle Bachelet como nueva responsable del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, en sustitución del diplomático jordano Zeid Raad al Hussein, cuyo mandato expirará con agosto, según han informado fuentes diplomáticas.
Las fuentes han explicado que la subsecretaria general, Amina Mohamed, reunió el martes a un grupo de embajadores para comunicarles la elección de Guterres. Una vez reciba la nominación oficial, Bachelet tendrá que obtener el respaldo mayoritario de los 193 países que forman la Asamblea General de la ONU.
Interrogado sobre este asunto, el portavoz del secretario general, Farhan Haq, se ha limitado a contestar que Guterres le comunicará "muy pronto" el nombre de la persona elegida al presidente de la Asamblea General, Miroslav Lajcak. "En estos momentos, no tengo un nombre que confirmar o anunciar", ha indicado.
Bachelet ha enarbolado la bandera de defensa de los Derechos Humanos como víctima de la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990). Su padre, el general Alberto Bachelet, fue ejecutado por las fuerzas golpistas y ella y su madre fueron prisioneras del régimen castrense.
Esta pediatra de profesión ha ocupado dos veces la Presidencia de Chile (2006-2010 y 2014-2018). Tras sus primeros cuatro años, abandonó La Moneda con una popularidad del 80 por ciento que le permitió volver cuatro años después, si bien su segundo mandato ha estado marcado por los escándalos de corrupción, que también han salpicado a su hijo y su nuera.
Bachelet fue la primera presidenta de ONU Mujeres, cargo que desempeñó entre 2010 y 2013, y estaba previsto que al término de su segundo mandato, el pasado 11 de marzo, regresara a Naciones Unidas para formar parte de la Junta Consultiva de Alto Nivel sobre Mediación.
UN PRECEDENTE COMBATIVO
Al Hussein explicó a la prensa el pasado mes de julio que no intentaría conseguir un segundo mandato como jefe de Derechos Humanos de la ONU porque estaba seguro de que no conseguiría el apoyo de los países miembro, debido a los duros reproches que ha hecho a muchos de ellos, como Estados Unidos, Rusia o China.
"Nosotros no hemos avergonzado a los gobiernos, se han avergonzado a ellos mismos", ha defendido el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Al Hussein ha admitido, no obstante, que se trata de un trabajo difícil. Tras una semana complicada el año pasado, su mujer le animó a ver un concurso de cocina emitido por la televisión británica. "El hombre sacó un suflé justo antes de que la competición acabara y se desinfló por completo. Empecé a llorar y no pude parar", ha contado.