BEIRUT, 30 Abr. (Reuters/EP) -
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha expresado sus dudas sobre la cooperación de Siria en el despliegue de observadores en el país para supervisar el cumplimiento del plan de paz propuesto por el enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan.
"El embajador sirio me ha dicho que ellos cooperarán sin condiciones, pero --para ser francos-- (no estoy seguro de) si podemos dar completa credibilidad a sus promesas, porque (hasta ahora) no las han mantenido", ha dicho Ban a la prensa durante su visita a Birmania.
En concreto, Ban ha apuntado que "el problema" es si el régimen de Bashar al Assad permitirá a la misión de observación desplegar a sus miembros por todo el país.
Según ha explicado el portavoz de Annan, Ahmad Fawzi, está previsto que este lunes lleguen a Siria 15 observadores que se unirán a los 15 ya presentes, sumando un total de 30 que formarán el grupo de avanzadilla de la misión de observación.
En total se espera que 300 observadores lleguen al país para supervisar durante 90 días el cumplimiento del alto el fuego que entró en vigor el pasado 12 de abril como parte del plan de paz propuesto por Annan y aceptado por el Gobierno de Al Assad.
La agencia de noticias SANA ha informado de que un grupo de observadores ha visitado el domingo el distrito de Jalidiya, en Homs, que fue blanco de los continuos bombardeos de las fuerzas gubernamentales antes del 12 de abril.
Activistas de Homs han apuntado que la violencia se ha reducido significativamente desde la semana pasada, cuando la misión decidió desplegar con carácter permanente un equipo formado por dos observadores en la ciudad.
"Todavía hay violaciones (de los Derechos Humanos), pero los bombardeos y el fuego de mortero han parado", ha dicho el activista Karam Abu Rabea a la agencia de noticias Reuters a través de Skype.
Además, ha indicado que gracias a la presencia de los observadores los residentes en Homs pudieron recuperar el sábado tres cadáveres que hasta entonces habían permanecido abandonados por la amenaza de los francotiradores.
La calma también ha permitido a los habitantes de la ciudad limpiar la basura. "Hay riesgo de que aparezcan enfermedades por la acumulación de basura. Hasta ahora ha estado en las calles", ha relatado.
Abu Rabea ha solicitado que los observadores de la ONU y la Liga Árabe permanezcan en la ciudad. "Hemos insistido en que los observadores se queden en Homs porque sabemos que si se van, los ataques seguirán", ha aseverado.
A pesar de ello, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Reino Unido, ha denunciado que dos personas han muerto a causa de los francotiradores en Homs y otras dos han muerto a manos de las fuerzas de seguridad en Hama y Deir Ezzor.
Dos activistas han denunciado que el sábado las fuerzas de seguridad realizaron una redada en el suburbio de Irbin, en Damasco, y arrestaron a varios líderes opositores que la semana pasada salieron a recibir a los observadores.
Además de en Homs, los observadores han establecido un puesto permanente de control en las ciudades de Deraa, donde comenzaron las protestas democráticas contra Al Assad, Hama e Idleb.
