DACCA, 27 Nov. (EP/AP) -
El próximo 21 de enero tendrán lugar en Bangladesh elecciones generales, según anunció hoy lunes la Comisión Electoral, a pesar de que miles de ciudadanos se reunieran para pedir la dimisión de los comisarios.
Los manifestantes se reunieron en la capital, Dacca, para presionar en favor de la ejecución reformas electorales así como de la dimisión de tres miembros de la comisión, a quienes se les acusa de favoritismo hacia la ex primera ministra Jaleda Zia.
Los manifestantes están vinculados a una alianza política que agrupa a 14 partidos y que está liderada por la principal rival de Zia, la también ex primera ministra Sheij Hasina. La alianza rechazó la fecha anunciada inmediatamente después de conocerse. "No participaremos en las elecciones a menos que nuestras demandas sean aceptadas", declaró a los periodistas el portavoz de la alianza, Abdul Jalil.
Jalil alegó que la lista de candidatos presentada por la Comisión Electoral ha excluido a muchos de sus partidarios e "incluido nombres falsificados de manera que los comicios puedan manipularse en favor de Khaleda Zia", declaró.
Las quejas en torno a las irregularidades electorales continúan todavía a pesar de que el jefe de la Comisión Electoral, M. A. Aziz, abandonara su cargo la semana pasada durante un plazo de tres meses. La alianza recibió positivamente la salida de Aziz, pero considera que este hecho no es suficiente para asegurar la imparcialidad en los comicios. La alianza está dirigiendo su protesta ahora sobre tres subalternos de Aziz, a quienes también se relaciona con dichas irregularidades.
Para hoy lunes había sido convocada una sentada por los manifestantes en frente de Bangabhaban, la residencia oficial del presidente, Iajuddin Ahmed. Sin embargo, 5.000 policías y fuerzas militares han sido desplegadas para impedir la concentración y han colocado una alambrada de espinos en el perímetro del edificio para evitar que se acerquen los manifestantes.
Ahmed lidera un Gobierno interino para supervisar las elecciones después de que se deshiciese el Gobierno de Zia el 29 de octubre, quien ha permanecido como primera ministra durante un periodo de cinco años.
El cierre de determinadas calles en Dacca ha provocado numerosos atascos en algunas partes de la ciudad, de 10 millones de habitantes, aunque no se han registrado actos de violencia. Sin embargo, choques entre rivales han dejado un saldo de tres muertos y docenas de heridos en las protestas de la semana pasada.
